En Reino Unido los sindicatos están recomendando a los británicos que se pregunten "¿Voy a morir?" antes de llamar al teléfono de ambulancias debido a la huelga de sus trabajadores. El mensaje busca incidir en la idea de que solo se avise por situaciones que pongan en peligro la vida.

Los sindicatos, que han movilizado al sector para exigir mejoras laborales que permitan afrontar el elevado coste de la vida en Reino Unido, han reconocido que responderán a los casos de categoría uno, como ataques cardíacos, pero los casos de categoría dos, incluidos los accidentes cerebrovasculares, se evaluarán antes de tomar una decisión sobre si enviar una ambulancia. De hecho, han pedido evitar actividades "arriesgadas" como "emborracharse".

También el ministro británico de Sanidad, Steve Barclay, pidió a la población utilizar "sentido común" a la hora de hacer actividades para evitar situaciones de riesgo por la huelga que secundan los trabajadores de ambulancias y paramédicos de emergencia en Inglaterra y Gales.

Esta medida de fuerza se suma a las convocadas este mes por otros sectores en demanda de mejoras laborales para hacer frente al fuerte incremento del coste de la vida en el Reino Unido, donde la inflación se situó en noviembre en el 10,7%.

"El sistema estará bajo una presión muy fuerte. Le estamos diciendo al público que ejerza su sentido común en cuanto a las actividades que realizan", declaró Barclay a la cadena Sky News.

Las autoridades han pedido a la población que, en caso de asistencia urgente, que primero lo haga a través del servicio de emergencia por internet y evite hacer la llamada telefónica, y también evite viajes en coche que no sean necesarios y algunas actividades deportivas.

Unos 750 miembros de las fuerzas armadas han sido desplegados para prestar ayuda, si bien se estima que sus labores serán limitadas, ya que no podrán facilitar asistencia médica.

Otros sectores a la huelga

Además de los sanitarios, otros sectores han anunciado huelgas. Los agentes de aduana de seis aeropuertos de las principales ciudades británicas han convocado huelga del 23 al 26 de diciembre y del 28 al 31. A su lado, los empleados de equipajes del aeropuerto de Heathrow, empiezan el viernes 23 un paro de 72 horas. Y el personal de seguridad del Eurostar, que se movilizan los días 22 y 23 de diciembre.

El servicio postal es otro de los que está demandando una subida de sueldo ante la inflación. Los empleados del Royal Mail ya hicieron huelga los pasados 9, 11, 14 y 15 de diciembre y repiten los 23 y 24.