Se avecinan tormentas para Arantxa Sánchez Vicario. La extenista y su exmarido, Josep Santacana, están acusados de un supuesto delito de alzamiento de bienes por el cual la Fiscalía pide para ambos una condena de cuatro años de cárcel.

Esto se debe a que la pareja habría ocultado un patrimonio para evitar que el Banco de Luxemburgo se cobrase una deuda de 7,5 millones de euros que ya había reclamado en julio de 2010, según ha comunicado Europa Press.

Así pues, ambos tendrán que sentarse ante el juez en la Ciudad de la Justicia del Juzgado Penal 25 de Barcelona desde el 12 hasta el 15 de septiembre de 2023. Un juicio de cuatro días al que acudirán muchos testigos para aportar pruebas documentales.

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En el escrito de acusación, el fiscal explica que la tenista actuó "bajo las consignas" de su exmarido y que los dos "idearon un plan consistente en descapitalizar su numeroso patrimonio".

Además de los cuatro años de cárcel, la Fiscalía pide 8.640 euros de multa para ambos, 6,1 millones en responsabilidad civil, y tres años y medio de prisión y multa de 7.560 euros para los cómplices.

Este conflicto legal se añade al proceso de divorcio que aún tienen pendiente desde que se separaron en 2018 y el cual también afecta a los dos hijos menores de edad que tienen en común.