La mañana del jueves 1 de diciembre ha sido decisiva en las vidas de Shakira y Gérard Piqué. Ambos se han visto las caras en el Juzgado de Familia 18 de L'Hospitalet de Llobregat (Barcelona) para firmar su acuerdo de separación.

El trámite ha sido rápido, pues ha durado alrededor de 15 minutos. Tanto la cantante como el exfutbolista han abandonado el edificio por separado para no encontrarse más allá de su reunión con la justicia.

De las cláusulas que incluye el acuerdo, solo se conoce que han acordado que los hijos se mudarán con la artista a Miami, en teoría después del día de Reyes, y su padre les podrá ver diez días al mes, además de poder disfrutar de los periodos de vacaciones que tengan en el colegio.

Shakira, fotografiada practicando surf en Cantabria acompañada de un joven monitor

Añadido a este, se ha especulado que dentro de las cláusulas se prohibiría que el ex jugador de FC Barcelona se mudase a la misma ciudad donde se encuentren sus hijos y que mucho menos lo hiciese con su nueva novia, Clara Chía, ya que Shakira no querría que sus hijos conviviesen con las futuras parejas que tengan.

Ha sido Ramón Tamborero, el abogado de Piqué, quien ha desmentido estos rumores: "Es absolutamente falso. Ambos podrán ver a los niños con sus parejas futuras sin ningún problema. Es una información que ha corrido por ahí y no se ajusta a la realidad".

Han sido las únicas declaraciones que el letrado ha informado, puesto que "por confidencialidad" no puede ofrecer más detalles. "No sé si se han visto o se han saludado, pero los dos están más tranquilos, más relajados y pensando en el bien de sus hijos que es lo más importante", concluye.