Cómo elegir un buen edredón, según los expertos

Una mujer duerme tapada con un edredón nórdico, en una imagen de archivo.
Una mujer duerme tapada con un edredón nórdico, en una imagen de archivo.
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Una mujer duerme tapada con un edredón nórdico, en una imagen de archivo.

Con el descenso generalizado de las temperaturas, muchas personas ya han sacado el edredón del armario para dormir. Existen diferentes tipos de edredones, desde sintéticos hasta de plumas o nórdicos, pero, ¿cuál es más conveniente según tus necesidades? 

"El material del relleno, la temperatura de la habitación y el tamaño de tu cama son clave para elegir bien y que tu edredón no termine guardado en un armario", explica la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU).

Tamaño, tipo de edredón y calidez

¿Relleno nórdico, edredón tradicional o colcha? ¿Cuál es mejor? Como indica la organización, los edredones tradicionales no necesitan funda, ya que su tejido exterior ya viene acompañado de un diseño. Sin embargo, "optar por un relleno nórdico tiene importantes ventajas", puesto que garantiza una vida útil más larga y protege al edredón de la suciedad.

Otro aspecto fundamental es el tamaño. "Como los colchones miden de media 28 centímetros de altura, tu edredón debería medir al menos 60 centímetros más que el ancho de tu cama y unos 30 centímetros más de largo", subraya la OCU. En el caso de ser dos personas, se necesitarán unos 25 centímetros más de ancho.

Respecto a la calidez del edredón, dependerá del gramaje y del tipo de relleno. Así, la OCU destaca que hay que tener en cuenta la temperatura del dormitorio, que dependerá de la zona geográfica, del aislamiento térmico de la propia vivienda y de la orientación. Para saber cuál es la calidez de un edredón debemos fijarnos en el TOG (Thermal Overall Grade). "Cuanto mayor sea el TOG, más cálido será el edredón o el saco de dormir".

"También puedes encontrar edredones 4 estaciones, compuestos por dos edredones, uno de calidez media y otro más fresco, que pueden usarse por separado o juntos", añaden. Sin embargo, su precio es de media un 60% más caro que un edredón de invierno, pero es más económico que comprar uno de invierno y otro diferente de verano por separado.

Cómo elegir el tipo de relleno

Hay dos tipos principales: los naturales (plumón, plumas, fibras vegetales, seda o lana) y los sintéticos, normalmente de poliéster. ¿Cuáles son las ventajas y desventajas de cada uno? En primer lugar, los edredones con relleno natural son muy demandados por su "poder aislante y termorregulador". Los más frecuentes combinan relleno de plumas y plumón con un tejido exterior. 

"Los más ricos en plumón son más cálidos y ligeros que los que tienen más plumas, y también son más caros. Los que tienen mayoría de plumas, por su parte, transpiran mejor", aclara la OCU.

No obstante, son más costosos que los sintéticos. Otra de las desventajas es que en este tipo de edredones pueden proliferar más fácilmente ácaros u otros gérmenes, su mantenimiento es más complejo y requieren más cuidado.

Respecto a los edredones sintéticos y de fibra, existen diferentes variedades, aunque la mayoría de los rellenos están compuestos de fibra hueca o fibra hueca siliconada. "Cuanto más aire quede retenido en los huecos de su interior, más ligero y cálido se volverá el edredón", señalan.

Una de las ventajas es que los edredones sintéticos son más económicos, además no causan alergias y son fáciles de lavar y mantener. No obstante, tienen una menor vida útil y son más pesados.

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