Un maquinista indica que el peligro de la curva del accidente del Alvia era "conocido" y estaba "en boca de todos"

Manuel Mato Varela y Juan Carlos Cons Iglesias
Manuel Mato Varela, maquinista jefe de tren y conocedor de la línea AV082, y Juan Carlos Cons Iglesias, formador y jefe de maquinistas de A Coruña
Xoán Rey / EFE
Manuel Mato Varela y Juan Carlos Cons Iglesias

Un maquinista jefe de tren, conocedor de la línea AV082 donde se produjo el accidente del Alvia en la curva de A Grandeira, en Santiago de Compostela, ha afirmado este martes que "se podía llegar a 200 kilómetros por hora" a la curva "sin infringir ninguna señal lateral" y que ese punto era peligroso, algo que estaba "en boca de todos".

Así lo ha declarado Manuel Mato Varela, el primer testigo en esta jornada en la vista del juicio del accidente del Alvia de 2013, que dejó 80 muertos y 145 heridos. La sesión se ha retomado a las 09:30 horas en la Ciudad de la Cultura de Santiago de Compostela.

Mato Varela, maquinista de Renfe desde 1983 y en Galicia desde 1987, ha sido propuesto como testigo por el abogado del maquinista acusado, Francisco José Garzón Amo. En el juicio ha declarado tajantemente que la curva de A Grandeira era "peligrosa" y que conocía el correo electrónico en forma de alerta enviado por el jefe de maquinistas de Ourense José Ramón Iglesias Mazaira, en el que se avisaba del riesgo de la curva.

También ha señalado que era algo que estaba "en boca de todo el mundo" y que cree que toda la plantilla lo sabía. "Todos veíamos lo que pasaba en esa curva", ha asegurado ante las preguntas del abogado de Garzón Amo.

Tras las preguntas del letrado del acusado, ha sido el turno de la Fiscalía, que ha insistido en la formación recibida por los maquinistas y en si esta se centraba en los "puntos críticos" o "clave" de la vía. Mato ha declarado que se les indicaba que debían tener "la referencia adecuada para frenar", pero que no era una concreta: "Había que atarse lo machos por si las moscas, nos dijeron que había que frenar con tiempo".

Según ha expresado, en la formación no le indicaron "un punto concreto" para iniciar la frenada antes de la entrada en la curva. "Cada maquinista es un mundo. Cada uno toma sus referencias", ha declarado, añadiendo que hay quienes tomaban como referencia "las casas" y otros que lo hacían con la señal avanzada E Prima 7.

Si hacen un informe sobre la peligrosidad de la curva y no les hacen caso, ¿nos lo van a hacer a nosotros?

La jueza, María Elena Fernández Currás, ha intervenido en este momento, en el que ha preguntado por qué, si no había referencias concretas y la señalización no era la correcta, ningún maquinista denunció las supuestas deficiencias de la curva.

Tanto el Ministerio Fiscal como la jueza han sido especialmente duros con el testigo, al que le han reprochado por qué señala ahora en su declaración de forma tajante la peligrosidad de la curva y no lo hizo en su momento ante sus superiores.

Aquí el testigo ha aludido al correo electrónico enviado por Iglesias Mazaira: "Sí que estaba denunciado. Pero si hacen un informe sobre la peligrosidad de la curva y no les hacen caso, ¿nos lo van a hacer a nosotros?", ha declarado.

"Mis mandos intermedios sabían de la peligrosidad de la curva lo mismo que yo", ha agregado. Aunque ha señalado no recordar que nadie de Adif o de seguridad de Renfe le acompañara en ningún viaje, ha insistido en que la peligrosidad de la curva era algo "conocido".

La jueza ha insistido en por qué ningún maquinista elaboró un parte de incidentes o trasladó esta preocupación sobre los riesgos de la misma a los sindicatos, a lo que Mato ha respondido que no realizó ningún parte a Adif porque no le compete eso, sino dar aviso a "a su jefe inmediato".

"Que tengamos que ser los maquinistas los que digamos dónde hay que poner las señales...", ha lamentado el testigo, a los que la jueza ha contestado con dureza: "Pues alguien tiene que ser, porque llevan a cientos de personas" (...) "Pensaba que iba muy segura en el tren, pero...", ha declarado.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento