Claves

De un golpe en la cabeza, descuartizada en la bañera, transportada en dos maletas... dudas sobre el asesinato de Juana Canal

El detenido por la desaparición de Juana Canal en 2003 Jesús P.H., a su llegada este viernes para pasar a disposición judicial en Ávila después de confesar que la enterró en dos hoyos.
El detenido por la desaparición de Juana Canal en 2003 Jesús P.H., a su llegada este viernes para pasar a disposición judicial en Ávila después de confesar que la enterró en dos hoyos.
EFE
El detenido por la desaparición de Juana Canal en 2003 Jesús P.H., a su llegada este viernes para pasar a disposición judicial en Ávila después de confesar que la enterró en dos hoyos.
La juez no lo cree y le acusa de homicidio en el ámbito de la violencia de género.
Atlas

La nueva confesión de Jesús P. H., el detenido por la desaparición de Juana Canal en 2003, ha desvelado algunas dudas sobre cómo habría asesinado a su entonces pareja. El asesino confeso, que ha ingresado este viernes al mediodía en prisión, ha cambiado de versión y ha confesado que la asesinó de un golpe en la cabeza tras una fuerte discusión en su piso del distrito madrileño de Ciudad Lineal y que después descuartizó su cuerpo en la bañera y lo enterró muy cerca de la finca inspeccionada en Navalacruz (Ávila). 

Los agentes tratan de completar algunas piezas del puzzle de este crimen, como la forma (mediante un golpe o con arma blanca) y el lugar exacto en el que el investigado pudo acabar con la vida de Juana, así como la manera en la que transportó el cadáver hasta la finca donde se centran las pesquisas. 

El detenido había declarado este jueves que se deshizo del cadáver de la que era su pareja tras encontrársela muerta, pero a última hora de la noche reconoció a los investigadores ser el autor el crimen, según ha adelantado el diario ABC y han confirmado a Efe fuentes próximas a la investigación.

En su confesión, realizada delante de su abogado, el detenido relató que la noche del 22 al 23 de febrero de 2003 llegó a la vivienda de la calle Boldano del madrileño barrio de Ciudad Lineal, donde discutió, como era habitual, con Juana.

Juana llegó a llamar a la Policía a raíz de esta bronca y en el inmueble se personaron varios agentes de la comisaría de Ciudad Lineal, pero no realizaron ninguna diligencia relevante y se marcharon del piso.

Según ABC, tanto Juana como Jesús aseguraron a los policías que habían mantenido una "simple discusión" y el ahora detenido llegó incluso a afirmar que iba a marcharse de la vivienda.

Sin embargo, cuando los agentes se marcharon del piso, Jesús volvió a agredir a Juana. Fue sobre las tres de la madrugada cuando la mató de un golpe, según la declaración firmada del propio Jesús y en la que habría  agregado, según el citado diario, que su intención no era matarla. 

Después, descuartizó el cadáver en dos partes en la bañera del inmueble, según ha confesado. 

El autor confeso del crimen debía deshacerse del cuerpo en pocas horas, ya que uno de los hijos de Juana -de su anterior pareja- había salido de fiesta y se había quedado a dormir en casa de unos familiares, pero tenía previsto volver por a la mañana siguiente. 

Al llegar al piso donde supuestamente ocurrieron los hechos, el menor -que según ABC falleció en 2016- encontró una nota manuscrita por Jesús en la que le decía que había discutido con su madre y que ella se había marchado de casa tras consumir "pastillas", por lo que iba a buscarla.

"Sergio, hemos vuelto a discutir (ha llamado a la Policía y todo), tu madre se ha tomado un montón de pastillas y se ha ido. Ha habido un momento en que se ha quedado muy 'grogi' (sic). Me ha amenazado con beber. Me voy a buscarla", rezaba el escrito.

Pero, según la confesión del detenido, había descuartizado el cadáver de su pareja y lo había transportado en dos maletas, al parecer sin ayuda de terceras personas, hasta un paraje de la localidad obulense de Navalacruz, a unos 100 kilómetros de la capital y donde la familia de Jesús tenía una finca.  

Los investigadores cogieron este jueves un hacha y varios cuchillos de esta finca para intentar cotejar las armas con posibles heridas marcadas en los huesos encontrados y poder así averiguar si Jesús mató a Juana a golpes o con un arma blanca, añade ABC.

Enterrada

Jesús P.H. confesó este jueves que enterró "en dos hoyos" a la que entonces era su pareja en el paraje situado a unos seis kilómetros del casco urbano de Navalacruz, donde en 2019 aparecieron los primeros restos, descubiertos casualmente por un senderista: un fémur y el cráneo.

Una vez confirmado que esos restos correspondían a Juana Canal, la semana pasada se desplazó a la zona un amplio dispositivo de la Policía Nacional y de la Guardia Civil, que encontraron más: una costilla, la cadera, otro fémur y una parte de la columna vertebral que, a falta del cotejo de ADN, también pertenecerían a Juana Canal. 

Mostrar comentarios

Códigos Descuento