Este lunes, el valor de la libra esterlina volvía a caer en picado por segunda vez en apenas unos días, tras el anuncio del ministro de Economía, Kwasi Kwarteng, sobre la posibilidad de aplicar más recortes fiscales a los ya anunciados por la primera ministra británica, Liz Truss. 

Ante esta situación, junto con la inflación disparada, el Banco de Inglaterra, que la semana pasada subió en 0,50 puntos sus tipos de interés, hasta el 2,25 %, emitió un comunicado en el que aseguraba que no dudarían en "cambiar las tasas tanto como sea necesario para que la inflación regrese al objetivo del 2% de manera sostenible a medio plazo". 

Tras el desplome de la divisa británica y como consecuencia de la volatilidad en los mercados financieros, varias entidades bancarias británicas han anunciado una retirada temporal de algunos productos financieros, como las hipotecas.

Incertidumbre en los mercados

El impacto de esta volatilidad ya se nota en el sector bancario y entidades como Virgin Money y Halifax han anunciado la suspensión de productos hipotecarios. "Dadas las condiciones del mercado, hemos retirado temporalmente los productos hipotecarios de Virgin Money para nuevos clientes", detallaba a la Agencia Efe un portavoz de la entidad.

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"Las solicitudes ya enviadas serán procesadas de manera normal", añadía la entidad, que tiene previsto ofrecer "un nuevo rango de productos durante esta semana". Por su parte, Halifax, filial de Lloyds Banking Group, ha subrayado que también retirará temporalmente sus productos hipotecarios con tasas asociadas.

Desde Llodys Banking indican que "como resultado de los cambios significativos en los precios del mercado hipotecario en las últimas semanas, estamos haciendo algunos cambios en nuestra oferta de productos".