La central térmica de As Pontes (A Coruña) continuará funcionando a la mitad de su actividad actual después de que la vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, haya decidido autorizar el desmantelamiento de dos de sus cuatro grupos. Según ha acordado con Endesa, que explota la planta, se empezarán a desmantelar los dos núcleos más obsoletos, mientras que los otros dos continuarán en funcionamiento "condicionalmente" a la suficiencia de suministro eléctrico que todavía estudia Red Eléctrica (REE).

El Ministerio de Transición Ecológica ha informado de la decisión de cerrar dos núcleos de la térmica gallega que, por el otro lado, supone no desmantelarla del todo, porque los otros dos seguirán trabajando, pendientes de que haya un suministro eléctrico suficiente de cara al invierno, que se plantea difícil por la crisis energética.

"Aunque el MITECO [Ministerio] ya contaba con un informe de REE elaborado en 2020 para autorizar el cierre de los cuatros grupos de la central de carbón, en la primavera de 2022 decidió solicitar un nuevo informe, a la vista de las tensiones provocadas en los mercados energéticos por la guerra en Ucrania y la elevada exportación de electricidad provocada por la sequía y la indisponibilidad de buena parte del parque nuclear francés", ha indicado el departamento de Ribera para explicar por qué de momento solo se cerrarán dos grupos y no los cuatro.

Cada uno de los cuatro grupos tiene una potencia de 350 MW, de modo que ahora As Pontes generará 700 con los dos grupos que seguirán en funcionamiento. Esto es más que toda la térmica de Los Barrios, subrayan fuentes sindicales, sobre As Pontes, que apuntan que es ahora mismo el mayor centro de producción de electricidad en España.

La cuestión es que esta electricidad se produce con carbón, una materia prima que el Gobierno quiere ir desterrando para hacer la transición ecológica. Fuentes sindicales han considerado "lógico" el cierre de dos grupos que no habían sido acondicionados y no cumplían la normativa medioambiental para seguir operando y que sí sigan otros dos que sí la cumplen, esperan que hasta que exista alternativas renovables al gas para hacerla funcionar, principalmente con hidrógeno verde. Aunque apuntan que el acuerdo que se ha anunciado este lunes es solo "un punto de partida", Endesa se han comprometido a dar un impulso logístico a la parte de la térmica que siga operativo para sustituirá los 1.400 MW de carbón de As Pontes por 1.300 MW renovables, en buena medida destinados a abastecer a industrias gallegas. También creará un centro logístico de mantenimiento eólico para sus instalaciones en España y levantará una planta de hidrógeno verde de 100 MW.

Dudas sobre electricidad

El Ministerio no concreta el tiempo en que estos dos grupos permanecerán abiertos, pero sí reconoce que mantenerlos operativos y no cerrarlos también, como era su intención antes de que estallara la crisis energética, se debe a que Red Eléctrica así lo recomienda, para tener "disponibilidad de potencia en el sistema eléctrico".

"Este segundo informe de REE contempla escenarios no previstos anteriormente, con distinta participación de la cogeneración y una elevada y constante exportación a los países vecinos", explica el Ministerio sobre la revisión de la suficiencia eléctrica que solicitó en primavera y que abrió el debate sobre qué parte desmantelar de la térmica o si pararla toda, algo que finalmente se ha descartado. "El análisis revela la conveniencia de cerrar los dos grupos inoperativos y de que el cierre de los otros dos quede condicionado al refuerzo de variables de disponibilidad de potencia en el sistema eléctrico mediante diversas medidas que se están poniendo en marcha, como el aumento de la disponibilidad de la cogeneración o el establecimiento de un mecanismo de respuesta activa de la demanda", añade.

Reconversión

Por lo que respecta a los dos grupos que sí se cierran, Ribera asegura su "compromiso total" con el empleo en la zona afectada por el cierre con proyectos previstos para la reconversión industrial que superan los 2.500 millones de inversión y generarán 1.300 empleos directos.

Por su parte, Endesa se ha comprometido a invertir en la zona 2.682 millones y a generar 1.361 empleos directos en un plan de reconversión que también incluye la una fábrica de neumáticos de la empresa Sentury Tire en la antigua mina de carbón con la que se calcula que se crearán 750 empleos y la papelera Ence ubicará allí una fábrica de biocombustibles, bio-productos y celulosa especial en los terrenos de la central, espera que cree 150 empleos directos, que llegarán a 1.000 contando los indirectos e inducidos.