Cuando en mayo de 2022 Reino Unido notificó varios casos de viruela del mono sin antecedente de viajes reciente a áreas endémicas o contacto con casos notificados previamente, la enfermedad era una gran desconocida para el grueso de la población en Europa y América. Cuatro meses después, España ha registrado 6.749 contagios y es el segundo país del mundo con más infectados en 2022, solo por detrás de Estados Unidos.

Son los datos publicados este martes por la Red Nacional de Vigilancia Epidemiológica (RENAVE), que apunta que, en el resto del mundo, el tercer país con más casos es Brasil, con 5.409. Lo siguen Francia (3.646), Alemania (3.501), Reino Unido (3.279).

Desde el 1 de enero y hasta el 5 de septiembre, se han notificado 52.997 casos de viruela del mono en todo el mundo y 18 muertes, según el último informe publicado este martes por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Sin embargo, el organismo ha informado de que el número de contagios nuevos informados semanalmente a nivel global ha disminuido en un 25,5% en la semana 35 (29 de agosto-4 de septiembre), en comparación con la anterior.

MINISTERIO DE SANIDAD

Hasta el momento, todas las comunidades autónomas han notificado casos de viruela del mono y solo Ceuta y Melilla no tienen constancia de ningún infectado en su territorio. Madrid es la región con más contagiados, con 2.366, y en segunda posición se encuentra Cataluña, con 2.018.

Asimismo, en Andalucía ya se han detectado 814 casos; en Aragón, 71; en Asturias, 56; en Canarias, 160; en Cantabria, 31; en Castilla-La Mancha, 56; en Castilla y León, 71; en Extremadura, 31; en Galicia, 113; en Baleares, 193; en La Rioja, 6; en Murcia, 54; en Navarra, 19; en el País Vasco, 220, y en la Comunidad Valenciana, 470.

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En vista de los casos notificados en el país, la mayoría de los afectados son hombres, adultos y nacidos en España, según el informe de este martes del Instituto de Salud Carlos III. Además, siete de cada diez casos presentaron síntomas generales y en más del 60% de los casos el

exantema se localizó en zona anogenital.

La evolución de los pacientes, en general, fue favorable. Sin embargo, entre un 3 y un 8% de los casos requirieron hospitalización y/o presentaron alguna complicación y dos personas acabaron falleciendo. En la mayoría de los casos, la transmisión se atribuye a un contacto estrecho en el contexto de una relación sexual.