En los últimos días, se ha viralizado en las redes sociales el vídeo del dueño de un supermercado que decide responder a un grupo de clientes atacándolos con una catana. Pese a que los vecinos alegan que se trata de una actuación continua, él asegura que solo utilizó el arma en defensa propia.
Durante la semana, Espejo público ha tratado de dar voz a todas las partes del conflicto vecinal que ha tenido lugar en Alginet (Valencia). Así, Vicente, propietario del local, ha asegurado que todo es una "sarta de mentiras" y ha narrado su versión de los hechos.
"Cuatro gitanos se sientan en una mesa. Empiezan a beber y a gritar. Había dos mesas de personas mayores enfrente", ha explicado Vicente que, además, ha agregado que esos clientes pidieron a la camarera que les dijese que bajasen la voz porque "estaban molestando".
Fue en el momento en que la camarera hizo la sugerencia cuando empezó el conflicto. "Nosotros somos gitanos y hablamos así. Quiero hablar con tu jefe", fue la respuesta del grupo. Así comenzó la primera de las peleas en la que tuvo que personarse la Guardia Civil. Al ver que los agentes tardaban y la situación se iba de las manos, Vicente optó por hacer uso de su catana: "En veinte minutos qué hacemos, ¿me quedo quito esperando a que me maten?".
Además, Vicente ha apuntado que el grupo conflictivo regresó horas después al establecimiento. Esta vez, acompañados de un hombre que "acaba de salir de prisión". En esta ocasión, ha explicado Vicente "la lían con la camarera y con el padre de la chiquilla", que habían ido a tomar un café a un bar cercano.
En este momento, Vicente decidió entrar e intentar frenar al hombre, que le amenazó con cortarle "el cuello". Según Vicente, le pidió que saliera a la calle y, tras la llegada de un nuevo grupo de la Guardia Civil, los ánimos comenzaron a calmarse hasta que, a las 21:30 horas, cuando el supermercado cerró, los asaltantes decidieron golpear la puerta, originando la última pelea.
Por su parte, Pau, que ha denunciado haber sido agredido con la catana de Vicente, ha mostrado en Espejo público el corte que tiene en su mano y por el que ha tenido que recibir varios puntos de sutura. "Nos ha amenazado de muerte, tenemos miedo de salir a la calle", ha argumentado Pau que, además, ha señalado que recibió el corte tratando de proteger a su hija.
Este viernes, el matinal de Antena 3 ha contactado con Cristian, cuñado de Pau, quien ha destacado que esta no es la primera vez que Vicente utiliza su catana para intimidar a los clientes del supermercado. "Este señor no puede tomarse la justicia por su mano", ha destacado Cristian.
De igual forma, Cristian ha destacado que, a raíz de la publicación de las imágenes en las que se ve a Vicente con la catana, han salido muchos más afectados por la ira del propietario del establecimiento. Así, ha desmentido todas las acusaciones de Vicente y ha resaltado su agresividad.
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