Los ministros de Defensa, Margarita Robles, y del Interior, Fernando Grande-Marlaska, declararán por escrito ante el juez de la Audiencia Nacional José Luis Calama, que les ha citado como testigos en la causa en la que investiga la infección de los móviles de miembros del Gobierno con el sistema Pegasus. 

Es la misma vía que utilizó el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, cuando fue interrogado también como testigo, una posibilidad a la que se pueden acoger todos los miembros del Ejecutivo.

"En principio, nuestra idea es hacerlo por escrito porque la ley nos permite esa posibilidad", ha afirmado Robles en declaraciones a los medios tras visitar la Unidad Médica de Aeroevacuación. La ministra, magistrada de carrera, ha manifestado su disposición a colaborar con la justicia.

Fuentes del Ministerio del Interior han confirmado a Efe la intención de Marlaska de responder por escrito a las preguntas que les plantee el titular del Juzgado Central de Instrucción número 4, previa consulta con la Fiscalía de la Audiencia Nacional.

Robles ha querido dejar claro que tanto ella como Marlaska son "perjudicados" por el hackeo de sus móviles, como también lo fue el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, por lo que ha afirmado que "poco" pueden "aportar" a la investigación judicial.

Eso sí, ha insistido en su deseo de que se llegue al esclarecimiento de la autoría material de las infecciones a los teléfonos móviles, aunque ha reconocido que es "muy difícil", una información que ambos ignoran "por completo".