Tras más de dos años del desalojo de La Ingobernable y el proyecto fallido de acoger un museo judío en uno de los edificios municipales más jugosos del corazón de Madrid -valorado en 10.008.876,99 euros- el inmueble de Prado 30 se convertirá en centro de salud, como llevan años demandando los vecinos de Las Letras. Pero si el pasado enero era una promesa, hoy es una realidad. 

Pues el Ayuntamiento de Madrid ha firmado un decreto, al que ha tenido acceso 20minutos, para ceder parte de este edificio a la Comunidad de Madrid, que se encargará de reconvertirlo en centro de salud. Para hacer efectiva la cesión, únicamente falta que la Comunidad "valide la documentación técnica y, por otro, el Servicio Madrileño de Salud (Sermas) elabore un certificado de viabilidad económica. Una vez esté completada la documentación preceptiva, se podrá cerrar el convenio", confirma la Consejería de Sanidad.

De este modo, José Luis Martínez-Almeida salda sus cuentas con los vecinos, así como, con Recupera Madrid, con quien se comprometió a ceder el edificio al Gobierno de Ayuso para ese fin, el de convertirlo en centro de salud, a cabio de sacar adelante los actuales Presupuestos de 2022. "Pusimos como línea roja que el Ayuntamiento de Madrid priorizará la construcción de ese centro tan demandado durante tantos años", recuerda el concejal José Manuel Calvo.

"La Comunidad de Madrid lo ha establecido como una actuación prioritaria, así que esperemos que muy pronto comenzarán las obras de construcción", continúa el concejal de Recupera Madrid. La Comunidad, en cambio, echa el freno y recuerda que la cesión del Ayuntamiento es solo el primer paso, dado que aún tienen que seguir con papeleos. "Estamos preparando la documentación necesaria y los informes preceptivos para poder formalizar el convenio de cesión de espacio con el Ayuntamiento, una vez que este ha firmado el decreto", sostiene la Consejería de Sanidad.

Todo para dar lo que "merecen" a los vecinos que hoy tienen un "miserable centro de salud en la calle Alameda, que no cumple con la accesibilidad ni los mínimos para dar el servicio", dice Calvo. El decreto también lo recoge. El edificio se encuentra "muy próximo al actual Centro de Salud Alameda", que presenta "muchas carencias para la población asignada" del distrito Centro, dice el documento sellado. La Comunidad de Madrid "solicita, por ello, la cesión parcial del edificio situado en el Paseo del Prado, 30 de Madrid, con accesos desde el Paseo del Prado y la calle Gobernador".

El área de Cultura cede, concretamente, 2.010,24 metros cuadrados de los y 3.028,80 metros cuadrados que tiene, según Registro de la Propiedad. Pues el Ayuntamiento dedicará la zona restante a actividades culturales. Esta parte del edificio que se cede está valorado en 6.642.958,69 euros. A través del acuerdo, el Ayuntamiento cede parte del espacio y deja todas las responsabilidades en manos de la Comunidad, que tendrá que hacerse cargo de gastos, licencias y reparaciones. La cesión tiene tiempo indefinido, aunque se le retirará en caso de que "transcurridos tres años no se haya puesto en funcionamiento el centro de salud".

De acuerdo con el decreto, el uso sanitario y cultural son compatibles. "Se informa que el uso de centro cultural que pretende ubicarse en parte del edificio se encuadra en la categoría de equipamiento cultural de nivel básico. En cuanto a la ubicación del uso de equipamiento sanitario en el resto del edificio, en sustitución del equipamiento singular cultural asignado, se entiende que puede implantarse directamente sin necesidad de informe previo del órgano competente, de la falta de necesidad del mismo o de la mayor urgencia del uso propuesto".

El decreto también recuerda que este inmueble pertenece al patrimonio especial, histórico y cultural. Primero, porque se encuentra en el área 'Paseo del Prado y el Buen Retiro, paisaje de las artes y de las ciencias', que fue declarado Patrimonio Mundial por la Unesco en julio de 2021, Además, su fachada principal da al Paseo del Prado, declarado Bien de Interés Cultural en la categoría de Monumento por el decreto 317/1999. Asimismo, forma parte del Bien de Interés Cultural, en la categoría de Conjunto Histórico 'Recinto de la Villa de Madrid', según el decreto 41/1995, y de la Zona de Protección arqueológica 'Recinto Histórico de la Villa de Madrid', declarada Bien de Interés Cultural por el decreto 61/1993.

Entre las obligaciones de la Comunidad, está "remitir al Distrito de Centro del Ayuntamiento de Madrid, cada dos años, un informe en el que se haga constar que continúa utilizando la superficie afectada como centro de salud". Y es que la titularidad sigue siendo municipal. Por esto mismo, consta que solo podrá utilizar el espacio como centro de salud y tiene prohibido cederlo o arrendarlo a terceras personas.

La Comunidad asume los gastos y el mantenimiento

Asimismo, será la Comunidad la que cargue con los gastos por consumo de agua, luz, electricidad o cualquier otro suministro o servicio que requiera la utilización del inmueble, y las reparaciones de zonas que puedan estar actualmente afectadas: "Cumplirá todas las obligaciones derivadas del uso de la superficie en orden a impuestos, seguros, obras de mantenimiento y mejoras y asumirá íntegramente la financiación de los gastos originados por las instalaciones". También serán a su cargo los impuestos, tasas y otros tributos locales o autonómicos. Por ejemplo, asumirá la Tasa por Prestación del Servicio de Gestión de Residuos Urbanos de Actividades.

Todos los gastos derivados del uso, mantenimiento y reparación serán por cuenta de la Comunidad de Madrid. Y deberá realizar las inspecciones técnicas y encargarse de obtener las licencias y permisos necesarios. Es más, el Ayuntamiento de Madrid podrá inspeccionar las instalaciones para comprobar que se está cumpliendo con el acuerdo.