La calle Alfredo Martín de Santovenia de Pisuerga (Valladolid) fue este pasado viernes el escenario de dos crímenes perpetrados por un residente de la vía, concretamente del portal número 8. La víctima y el presunto asesino eran vecinos, pero uno de los datos que han salido a la luz es que ambos residían en sus viviendas como okupas, según informa El Norte de Castilla. Una situación muy habitual en el barrio, donde varias personas habitan en casas que no son de su propiedad.

Los vecinos de esta zona sufren este problema desde 2008. Cuando los propietarios se mudaron a sus viviendas recién construidas no se podían imaginar semejante situación. Todos ellos adquirieron estas propiedades en el inicio de la crisis del ladrillo, era un momento en el que no podían comprar una casa en la capital, ya que estaba fuera de sus posibilidades económicas. Los precios de estas viviendas rondaban sobre los 180.000 euros. 

Los pisos de los once bloques, listos para estrenar, se vendieron muy bien, excepto los del bloque número 8, el último edificado en esta calle, del cual de las 16 viviendas construidas solo se vendieron cinco. Fue en 2012 cuando la víctima y su familia se mudaron a uno de sus pisos desocupados para residir en él de forma ilegal. Poco tiempo después, se trasladó también el presunto asesino. Actualmente, en este bloque hay más pisos okupados que comprados.

Asesinato de un vecino del barrio y de un guardia civil

El conflicto comenzó el pasado jueves por el pinchazo de las ruedas de un coche y las explicaciones oportunas tras acusar a su vecino y viejo amigo del acto vandálico, según ABC. El enfrentamiento continuó la noche del pasado viernes con la pelea entre dos hombres, donde uno de ellos resultó herido. Tras acudir al hospital y volver a su vivienda en la calle Alfredo Martín, el agresor estaba esperándole y allí, en el portal de su casa, y lo mató con un arma de fuego. Todo ocurría alrededor de las 1:43 de la madrugada cuando la Guardia Civil de Valladolid solicitó asistencia técnica. Al llegar el personal sanitario confirmaron que el varón de 45 años había fallecido. La víctima es Dionisio Alonso Pardo, vecino del barrio y antiguo amigo de su presunto asesino.

Al matar a su vecino, el agresor apodado 'El Chiqui' intentó matar al hijo de este, pero el arma se quedó encasquillada y su intento de asesinato fue fallido. 

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El hombre tras asesinar a su vecino, salió corriendo y se atrincheró en su casa con un rehén. Esta tensa situación se truncó aún más alrededor de las 8 de la mañana cuando el presunto asesino disparó en la cabeza a un guardia que negociaba para que desistiese y se entregara.

El agente tiroteado, Alonso Casado, permaneció ingresado desde el pasado viernes, 1 de julio, en el Hospital Clínico Universitario de Valladolid, donde fue operado de urgencia ese mismo día, pero finalmente perdió la la vida este martes.

Finalmente, alrededor de las 14 de la tarde, el alcalde de Santovenia declaró que el rehén ya había salido de la vivienda del agresor en la que se encontraba atrincherado. Quince minutos después, el asesino se entregó a las fuerzas de seguridad.