Meghan Markle se posiciona a favor del aborto: "Es un retroceso en nuestros derechos… Iré a Washington"

Ocurrió en aquel julio pero no se supo hasta noviembre. Era 2020. Lo dio a conocer motu proprio, en una carta abierta para The New York Times. Había sufrido un aborto espontáneo.

Aquella experiencia, que algunos partidarios de las políticas antiabortistas estadounidenses han esgrimido como un trance que hay que pasar para cambiar a su mentalidad provida, no le cambió en absoluto el parecer a Meghan Markle, quien se ha posicionado en contra de la reciente derogación por parte del Tribunal Supremo de la ley Roe v. Wade en su última e importante entrevista.

Su importancia, además, radica en la entrevistadora: ni más ni menos que la conocidísima activista feminista Gloria Steinem. Así, ambas han charlado para la revista Vogue, siendo inevitable que saliese a colación las nuevas restricciones que cada estado está imponiendo en sus jurisdicciones, algunas llegando a penar con más años de cárcel a una chica que quisiese abortar el fruto de una violación que al violador en cuestión.

"Es un disparate que aún estemos luchando por algo así. Es un retroceso en nuestros derechos… Yo voy a ir a Washington", ha declarado la duquesa de Sussex. Unas palabras que no han hecho sino incentivar la creencia de que su siguiente etapa vital estará ligada a la política, incluso con la posibilidad de que haga campaña para la Casa Blanca. "Está claro que nuestra integridad física no les importa y que, por tanto, nosotras tampoco les importamos. Pero entre nosotras sí. Las mujeres importamos", ha asegurado.

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Para Meghan Markle, "nadie debería verse obligado a tomar una decisión que no quiere tomar, que es insegura, o que pone en peligro su vida", así sea "una mujer en una situación difícil, una mujer que no está lista para formar una familia" o, añade la duquesa, "cualquier pareja" que prefiera "planificar su familia de la manera que tenga más sentido para ellos". "Se trata solo de tener una opción más", ha resumido.

Precisamente por ello cree que "el objetivo son las mujeres", si bien desde la Corte Suprema y cada vez más estados, en su mayoría republicanos, que están prohibiendo la interrupción voluntaria del embarazo no se dan cuenta de que "las consecuencias impactan en todos nosotros". "Mi marido y yo lo hemos hablado mucho estos últimos días. Él es feminista también", ha añadido.

Meghan se considera con suerte de poder hablar estas cosas con el príncipe Harry y por eso cree que hay que normalizar y romper tabúes sobre el cuerpo femenino, el embarazo y el aborto: "Lo que les ocurre a nuestros cuerpos es tremendamente personal. Y eso puede llevar al silencio y al estigma, incluso cuando tantas de nosotras tenemos que lidiar con momentos muy frágiles de salud".

"Yo sé lo que es sufrir un aborto y he podido hablar de ello públicamente", ha afirmado Markle antes de finalizar con cómo, a pesar de aquella experiencia, ahora es una madre feliz. "Pienso en lo afortunada que he sido por haber podido tener a mis dos niños. Conozco qué se siente al tener una conexión con aquello que crece dentro de tu cuerpo", ha terminado, explicando que esa al menos fue su opción.