La infanta Cristina cumple 57 años y lo hace de la manera más agridulce que se podía imaginar. Es el primer cumpleaños en 25 años que pasa sin el que fuera su marido, Iñaki Urdangarin.

La hija de Juan Carlos I se encuentra en su residencia de Ginebra, acompañada de su hija Irene, lugar donde celebrará su día de una manera íntima y sin sobresaltos.

Tras llevar alejada de los focos mediáticos desde que salieron a la luz las imágenes de su exmarido con Ainhoa Armentia, poco se sabe de la vida de la exduquesa.

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Únicamente que va y viene de Suiza a Barcelona por obligaciones profesionales y por su hijo Pablo, que reside en la ciudad debido a su compromiso con el equipo de balonmano de la segunda plantilla del FC Barcelona.

Y, aunque no celebre su cumpleaños con el padre de sus hijos debido a su ruptura, ambos se reencontraron el pasado 6 de junio en el aniversario de la benjamina de la familia.

Cierto es que la infanta no se encuentre en su mejor momento, pero cuenta con el apoyo de sus hijos y de su familia, destacando la buena relación que tiene con su padre.