Intervienen una tonelada de rodamientos "piratas" con riesgo de descarrilamiento suministrados a Metrovalencia

  • Una empresa de Zaragoza que resultó adjudicataria del concurso vendió los 160 dispositivos, pero provenían de otra.
  • La operación ha sido llevada a cabo por la Policía Nacional, la Agencia Tributaria y la Oficina Europea Antifraude.
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Convoy de Metrovalencia a su paso por una estación subterránea.
20M EP
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Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria ha intervenido una tonelada de rodamientos de ferrocarril falsificados, suministrados por una empresa de Zaragoza a Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana (FGV), la empresa pública que gestiona el metro de València y el Tram de Alicante, mediante concurso público, cuyo uso hubiera puesto en riesgo la seguridad de los trenes y la de los propios pasajeros, ya que su rotura produciría el descarrilamiento de los vagones.

En una operación conjunta con la Policía Nacional, y en colaboración con la Oficina Europea de Lucha contra el Fraude, la investigación se inició a raíz de una denuncia presentada por una empresa, que alertó de la adquisición de 160 rodamientos que supuestamente eran de su marca por parte de Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana, pero que habían sido suministrados por otra empresa que participaba en el concurso público y que obtuvo la licitación por el mismo precio que ellos.

Según una nota del Ministerio del Interior, cuando FGV recibió el primer pedido de 80 rodamientos, sospechó de ellos por la poca similitud que existía entre los recibidos y los que Ferrocarrils tenía originales de esa misma marca, por lo que se puso en contacto con la empresa investigada, que le envió un documento que "confirmaba" su autenticidad.

Debido a que el documento recibido infundía sospechas de falsedad, Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana decidió ponerse en contacto con la empresa original, que, con sus propios peritos, confirmó la falsedad de los rodamientos, por lo que presentó una denuncia por vulneración de la marca y por el elevado riesgo que supone falsificar piezas de esta importancia.

Durante la investigación a la empresa suministradora de los rodamientos, se detectaron empresas importadoras que tenían expedientes de retención y destrucción en diversas fronteras europeas. Se trataba de importaciones irregulares que contravienen los reglamentos de la Unión Europea en vulneración de marcas.

Con toda esta información, se inspeccionaron dos naves en Zaragoza, se encontró la muestra de los rodamientos vendidos a FGV y se procedió a la incautación de los 160 rodamientos (una tonelada) vendidos en València.

Una persona ha sido detenida mientras que otra está siendo investigada por un presunto delito contra la propiedad industrial y otro de contrabando.

En la operación han participado las unidades operativas de Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria en Madrid y en Zaragoza, la Policía Nacional y la OLAF, Oficina europea de lucha contra el fraude.

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