Las fiestas de San Isidro, que dieron su pistoletazo de salida el pasado jueves y concluyen esta tarde, han transcurrido "bastante tranquilas para la cantidad de público que ha asistido". Este es el balance preliminar que ha ofrecido esta mañana la delegada de Seguridad y Emergencias, Inmaculada Sanz, que, en términos generales, calcula escasos incidentes para un San Isidro "absolutamente multitudinario".

Asimismo, la delegada ha celebrado la actuación de la policía frente a la amenaza de las bandas juveniles, tras el incremento de su actividad en el último año. "Se ha detectado la presencia de posibles personas pertenecientes a bandas juveniles, pero la presencia policial ha sido tan importante que se ha podido evitar cualquier tipo de altercado".

"No ha habido incidentes graves, pero sí situaciones que se suelen producir en estas fiestas, como alguna incautación de armas, pero sin ninguna situación de peligro", ha explicado Sanz, que este martes dará el balance final. Por el momento, el suceso más relevante se produjo en la tarde del domingo, en la Plaza Mayor, con la detección de una persona que podía portar un arma.  Según varios testigos, el sujeto presentaba una actitud muy sospechosa y podría portarla, así que trataron de identificarle y opuso tal resistencia que fue detenido, aunque finalmente no llevaba arma.

También cabe destacar las "pequeñas tensiones" que se produjeron el domingo con motivo de la actuación de Chanel. "Hubo mucha gente que intentó entrar en la Plaza Mayor cuando el aforo estaba completo y hubo que hacer un dispuesto policial muy importante". Aunque, de nuevo, sin grandes altercados. Samur, por su parte, ha llegado a atender, hasta la fecha, a 120 personas por intoxicación etílicas, caídas o mareos.