Los dos diputados de la CUP no aplaudieron al presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, porque censuran que haya ilegalizado algunos partidos o dé cabida en el Estado a "elementos neonazis", ha justificado el diputado Albert Botran: "Fundirnos en un aplauso acrítico no le hace bien a la causa de la paz".

Tienen claro, ha subrayado en declaraciones en el Congreso, que Ucrania "es el país agredido y que Putin es el agresor" pero opinan que su acción política "no debe ser aplaudida acríticamente", insistiendo en que hay fuerzas políticas, como el Partido Comunista, que han sido ilegalizados sin motivo y hay "elementos neonazis" dentro de las estructuras del Estado, como en la Guardia Nacional.

Eso fue también uno de los motivos, aparte de otros, por los que fueron los únicos que no apoyaron la declaración institucional que Ciudadanos estaba promoviendo en favor de Ucrania y de condena a los "crímenes de guerra" del Ejército ruso y que por falta de unanimidad no salió adelante.

Según ha explicado Botran, pidieron que en lugar de una declaración institucional se hiciera a través de una proposición no de ley para que el texto se pudiera enmendar y los grupos pudieran dejar constancia de su posicionamiento, acusando a Cs de "manipular" sus palabras.

Ha dicho que están a favor de investigar cualquier crimen de guerra, pero una vez más -ha reprochado- se ve "el oportunismo de Cs, que esta vez quiere llamar la atención con la guerra de Ucrania".

Y sobre el apoyo de Pedro Sánchez a la entrada de Ucrania en la Unión Europea, el diputado independentista ha contestado que "quizá no es la mejor solución" para el futuro del país.