La ley de Mercado Abierto de la Comunidad de Madrid, que se envió a la Asamblea regional como proyecto el pasado febrero y se espera que quede aprobada a finales de abril, ha sido este jueves protagonista de una jornada de ponencias y debate en Cunef, un centro universitario privado adscrito a la Universidad Complutense de Madrid (UCM). La presidenta Isabel Díaz Ayuso ha presumido de que esta ley facilita la actividad económica y por ello ha llamado a otras comunidades autónomas a poner en marcha iniciativas similares.

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Cuando esté aprobada, la ley permitirá que empresas y autónomos establecidos legalmente en otros territorios puedan empezar a funcionar en Madrid sin necesidad de solicitar permisos y licencias que ya tengan en el lugar en el que están radicadas. El mismo espíritu se aplica a los productos: podrán venderse en la comunidad si ya están autorizados en otros territorios.

"El exceso de burocracia, de normas, de reglas de exigencias ha llenado de fronteras la geografía española e impide a sus empresarios buscar nuevas oportunidades entre comunidades", ha opinado Díaz Ayuso, que ha abundado que la "maraña de trabas" deriva en que algunos proyectos empresariales se queden por el camino o directamente fracasen.

De acuerdo con las estimaciones de la Consejería de Economía, Hacienda y Empleo que dirige Javier Fernández-Lasquetty, que también ha estado presente en la jornada en Cunef, la ley de Mercado Abierto generará una riqueza de 4.000 millones de euros, un crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) del 1,6% y 50.000 nuevos puestos de trabajo.

Cifras como estas, y regulaciones como las que se impulsan desde la Comunidad de Madrid, son, a juicio de la presidenta regional, las que han convertido a la región en "primera economía nacional" por delante de Cataluña. Además, ha subrayado que se ha hecho sin aumentar excesivamente la deuda, porque ha trasladado que Madrid cerró 2021 con la menor deuda de todas las comunidades tras caer este indicador un 0,6% y subir la media nacional el 6,1%.

"La prosperidad de todos los territorios es cosa de todas las administraciones, que somos un gran país y debemos operar como tal", ha abundado Díaz Ayuso, señalando que leyes como esta benefician a Madrid y también al resto del territorio, y opinando que otras comunidades autónomas deberían replicarla. "España no se puede permitir 17 regulaciones diferentes", ha venido a decir. 

Porque la presidenta madrileña no ha querido obviar, como ya hiciera este miércoles desde Bruselas, los datos económicos nacionales, que revelan una inflación desconocida en décadas. "Los precios están subiendo a un ritmo de casi el 10% anual. Esto supone casi cuatro puntos más que la media europea y es un buen reflejo de los efectos de las políticas ideológicas e intervencionistas que llevamos sufriendo desde hace tres años", ha lamentado Díaz Ayuso para criticar la coyuntura y al Gobierno central.

"Los empresarios necesitan un respiro, que se les deje trabajar... la presión y el ahogo a los que están sometidos es insoportable y deja al país en una situación crítica", ha incidido, de nuevo defendiendo una política de baja presión fiscal y desregulación.

Comunidad de Madrid

Como ya le sucediera el pasado septiembre en otra visita una universidad privada, Isabel Díaz Ayuso ha sido aplaudida hasta la saciedad por los estudiantes. Entonces dijo que se había sentido como la cantante Britney Spears y este jueves puede que se haya llevado de Cunef una sensación similar. Varias decenas de ellos, y algunos asistentes más al acto que ya peinaban canas, permanecían apostados en la puerta del centro desde mucho antes de la hora de llegada prevista de la presidenta, y tras intervenir desde el atril y dar por concluida la jornada, muchos más se han acercado hasta los pies del escenario para tratar de tomarse una foto con ella.

La mayoría lo han conseguido: por espacio de más de media hora la presidenta madrileña ha estado posando para selfies de numerosos chavales. Cuando se disponía a abandonar la universidad, en los pasillos más móviles en alto y aplausos.