El fin de semana llega con planes que incluyen una zarzuela hecha por y para jóvenes; el regreso a los escenarios de Ainhoa Arteta; una obra de teatro donde lo fingido resulta verdadero; Madrid convertido en un exponente del Arte Moderno y Contemporáneo; un Carnaval con un desfile muy especial en Matadero; las más vanguardistas escenografías en una exposición; y, por último, una combinación de música rock y plástica.
1. Teatro. 'Lo fingido verdadero' de Félix Lope de Vega
La Compañía Nacional de Teatro Clásico está representando Lo fingido verdadero en el Teatro de la Comedia, una obra de Lope de Vega realmente original y con una desconcertante estructura. Un texto que, como Lluís Homar ha señalado, es una especie de tríptico que comienza siendo un drama histórico, continúa adoptando el fondo y forma de una comedia metateatral y finaliza como auto o drama de santidad. Algunos especialistas atribuyen a este texto la categoría de un Hamlet, dentro de la producción de Lope de Vega, mientras otros lo consideran una composición deslavazada, pero lo cierto es que, en manos de Homar, quien asume la dirección de la obra, alcanza un resultado profundo y equilibrado.
El acto primero alberga la ensoñación del poderoso, que lleva al César a creerse uno más entre los dioses, o al menos a tutearles abiertamente, pretensión pulverizada por un rayo celestial que parte en dos tal osadía. Éste y otros hechos trágicos aúpan al poder a Diocleciano, encarnado por el gran Arturo Querejeta, quien aporta al verso reposo y una densidad muy elocuente, en una nueva lección interpretativa.
En la función adquiere protagonismo simbólico la figura del pan, desacralizado aún en el primer acto, pero ligado a uno de los muchos augurios que parecían guiar el devenir de la historia romana. Cuando Diocleciano lo reparte entre sus compañeros de batalla, oficiando una especie de rito, anticipa la comunión del último acto, el poderoso simbolismo que adquiere el pan a la luz del Cristianismo perseguido en Roma.
El segundo acto se asienta en la tranquilidad del palacio, donde aparece el teatro como divertimento para el César, y este recurso es aprovechado por Lope para trenzar un juego metateatral lleno de ingenio y brillantez. Confundir las relaciones de los personajes en escena con los anhelos íntimos de cada actor, fragua en una divertida pieza de fina comedia, donde varios personajes son espectadores como nosotros. Una genialidad de Lope, anticipo de tantos creadores que profundizaron en esa autorreferencia.
A partir de ese momento, asistimos a la fabulosa interpretación de Israel Elejalde, quien tiene la virtud de cargar de sentido cada estrofa, cada palabra, ajustar el ritmo otorgando claridad a un texto dificultoso, añadiendo el componente corporal siempre medido. Vicente Fuentes, responsable de Voz y palabra en este montaje, reconocía que parte del trabajo realizado se ha centrado en controlar el ritmo del verso, y mencionaba el ejemplo de la caja de cambios de un automóvil, que permite aplicar las revoluciones adecuadas para cada momento. Se puede prescindir de la métrica o de la rima, pero nunca del ritmo, porque sería acabar con el lenguaje poético. Pues bien, Israel consigue exactamente esa gradación que exalta el verso y consigue una expresividad al alcance de pocos. El actor reconoce que el verso es una especie de jeroglífico y técnicamente te obliga a ejercitar todo lo aprendido durante años, pero el resultado es soberbio.
El tercer acto muestra el momento culminante en que lo fingido torna en verdadero, en que la ficción teatral se convierte en realidad bajo una confesión donde el actor se inmola conscientemente al revelar su fe en el Cristianismo. El final compone una imagen que simboliza el supremo sacrificio, de gran impacto visual a pesar de algún aparataje un tanto excesivo y de unas composiciones musicales francamente inadecuadas, único borrón de un excelente montaje de la Compañía que cuida de nuestro Teatro Clásico. No se la pierdan. Estará hasta el 27 de marzo en el Teatro de la Comedia.
2. Clásica y zarzuela. Ainhoa Arteta y 'El sobre verde' en proyecto Zarza
Tras unos meses complicados, que la han mantenido forzosamente alejada del público, la soprano Ainhoa Arteta regresará finalmente a los escenarios el domingo 27 de febrero a las 20h. Para este reencuentro con los espectadores, la cantante ha elegido el Teatro de la Zarzuela, que considera su casa, y ha querido compartir el que seguramente será uno de los momentos más emocionantes de su vida con otro grande de la lírica, un amigo del alma: el tenor mexicano Ramón Vargas. Un colega de profesión al que podemos ver en esta triunfal producción de La Bohème en el Met de Nueva York, al que esperamos pronto pueda regresar encabezando cartel.
Como era de esperar, el concierto ha colgado desde hace semanas el cartel de entradas agotadas, pero siempre se puede confiar en alguna baja de última hora de algún conocido, que nos pueda habilitar. También funciona acudir a la puerta poco antes del concierto para intentarlo. El recital, en el que ambos intérpretes estarán acompañados por el pianista Javier Carmena, girará en torno a la música española, mexicana, sudamericana e italiana.
Y sin salir del Teatro de la Zarzuela, el proyecto Zarza, que trata de introducir en la zarzuela a los jóvenes cantantes, nos presenta El sobre verde, de Jacinto Guerrero, que en palabras de Álvaro Tato, responsable de la revisión de texto, se trata de “un sainete en dos actos con gotas de revista, un espectáculo musical ambientado en el Madrid popular de hace un siglo… y en el Nueva York de los grandes rascacielos. En su época tuvo un enorme éxito, y hoy subimos al escenario del Teatro de la Zarzuela una revisión de la obra para el público joven (y no tan joven). Si nos lo permite la diosa Fortuna, rescataremos esta comedia cabaretera, divertida y canalla con un tema que no ha perdido actualidad: el dinero”.
Sin duda será la ocasión para disfrutar de una obra divertida y con música zarzuelera de primer nivel, en las manos de nuestros cantantes más jóvenes. Estará en cartel el viernes 25 por la tarde y el sábado 26, en función de mañana y tarde.
3. Carnaval. Disfrázate de cualquier especie natural en Matadero
Matadero organiza un Carnaval muy especial, lleno de especies naturales de lo más extraño, este fin de semana. El Centro de creación contemporánea invita al público a vestirse de cualquier especie que no sea la nuestra, claro: animales, vegetales, hongos o microorganismos, que tendrá su colofón el sábado 26 a las 16 horas, con un Gran desfile de los camaradas terrestres.
Para poder crear sus atuendos, el público contará con un manual de instrucciones creado tras un taller intensivo de diseño de disfraces. En el taller han participado 120 estudiantes de diseño de las escuelas colaboradoras de Dimad, guiados por la diseñadora de moda y arquitecta Raquel Buj.
Los niños podrán crear sus propios diseños en los talleres infantiles que se celebrarán los días 25 y 26 de febrero. Para ellos, Lorena Delgado Piña propone a las familias formar parte de una aventura en la que pasarán de ser humanos a evolucionar hacia especies animales. Su nueva piel mutará en un trabajo cooperativo en el que pequeños y grandes, saldrán transformados en nuevas especies no humanas, inspiradas en cefalópodos, aves o insectos voladores. En el taller se introducirá el trabajo con nuevos materiales biológicos como los bioplásticos, y otros menos frecuentes como los films dicroicos, las fibras de angelina o las siliconas, combinados con otros más cotidianos como el cartón, cartulina o papeles de diferentes grosores.
Tras mostrar sus nuevas identidades creadas en el taller, todas las familias están invitadas a participar en el Gran encuentro de los camaradas terrestres, festejando juntas una gran comunidad de especies. Algo parecido ocurre en la sabana africana, pero no resulta tan divertido para los más pequeños, se lo aseguro.
4. Exposición. 'Poéticas de lo real' Escenografía de vanguardia alemana
Poéticas de lo real. Escenografía de vanguardia alemana 1989-2019 es una exposición producida por CentroCentro, con la colaboración del Goethe Institut, y se despliega en la cuarta planta del Palacio de Cibeles. Es un acercamiento al trabajo de una selección de artistas de la última generación de escenógrafos alemanes, considerada unánimemente como el mayor referente de la vanguardia internacional.
La exposición reúne fotografías y audiovisuales, así como reproducciones de algunas escenografías, de modo que ofrece un panorama bastante enriquecedor y descriptivo del teatro alemán desde los años noventa. Antonio Marín, comisario de la exposición, nos describió la muestra con detalle, confirmando que se trata de una selección excepcional, porque agrupa a unos artistas, de diferentes generaciones pero con concepciones convergentes, cosa que nunca se había hecho hasta el momento, ni siquiera en Alemania.
El denominador común del trabajo documentado se caracteriza por haber hecho de lo real un principio ético y estético, para aportar a la escenografía una verdad y una autonomía que hereda y reformula el legado de las vanguardias performativas del siglo XX. El detalle y acabado de las creaciones mostradas son espectaculares y constituye una visita gozosa para todo aficionado al teatro y a la escena planteada con opulencia, sobre todo en estos tiempos en que la parquedad de muchas propuestas es desoladora.
Anna Viebrock (Colonia, 1951) es la figura primigenia de este movimiento y compone para sus coreografías una especie de collage en tres dimensiones, tomando elementos reales de diferentes espacios y tiempos, para conformar unos cuadros escénicos de una fuerza tremenda. Aquí podemos ver, por cierto, su trabajo en la ópera Les Contes d’Hoffmann en el Teatro Real:
Bert Neumann (1960-2015) provenía de la RDA y fue uno de los creadores más influyentes en la escenografía contemporánea, a pesar de que su carrera quedó cercenada demasiado pronto. Vemos abajo una impactante escenografía giratoria para El idiota de Dostoievsky, realizada en el Teatro Volksbühne de Berlín, recreando una especie de ciudad donde algunas escenas sólo se podían ver retransmitidas a través de pantallas. También se muestran fotografías de los impresionantes conglomerados escenográficos de Aleksandar Denic (Belgrado, 1963), algunos sobre inmensas plataformas giratorias, con una estética cinematográfica que integra también pantallas y neones.
Llama especialmente la atención que los montajes vislumbrados en las fotografías suponen un despliegue de una riqueza apabullante. Hay muchos marcos alemanes de aquella época ahí metidos y, para explicarlo, Antonio Marín apuntaba la relevancia social que siempre ha rodeado al teatro en Alemania, algo que justificaba unos presupuestos para los teatros públicos capaces de sufragar tales inversiones.
La exposición se puede visitar de forma gratuita, del 10 de febrero al 15 de mayo, y se complementará con charlas protagonizadas por algunos de estos destacados escenógrafos y teóricos de la escena.
5. Arte. ARCOmadrid 2022 y SAM Salón de Arte Moderno
Dos propuestas de Arte para este fin de semana, un salón y una feria, más modesto el primero y mastodóntica la segunda, uno centrado en el Arte Moderno y la otra en el Contemporáneo.
Primero hablaremos de SAM SALÓN DE ARTE MODERNO, organizado por el galerista Jorge Alcolea, en colaboración con Distrito41 y de MCDM (Madrid Capital de Moda, de la Dirección General de Comercio del Ayuntamiento). Se celebra este año en la Fundación Carlos de Amberes del 22 al 27 de febrero.
Esta 5ª edición del Salón se afianza como referencia especializada en Vanguardias y Arte Moderno, y está conformada por quince galerías de todos los puntos del país. Expone más de 500 obras de consagrados artistas nacionales e internacionales, que se podrían encontrar en cualquier museo del mundo.
En cuanto a la Feria de Arte Contemporáneo, evidentemente sabrán que nos estamos refiriendo a ARCOmadrid 2022, que vuelve a su fechas habituales de exposición, después de que la edición del año pasado se trasladara a pleno mes de julio, para sortear alguna de las primeras olas coronavíricas. Este año celebra su Aniversario 40 (+1), y lo hará del 23 al 27 de febrero en el recinto de IFEMA MADRID.
ARCOmadrid 2022 reunirá a una selección de grandes nombres del galerismo internacional, galerías que han tenido presencia en ARCOmadrid a lo largo de su trayectoria, y que serán invitadas a participar en la sección conmemorativa de la feria, ARCO 40 (+1) Aniversario. Un programa conformado por alrededor de 20 galerías que forman parte de la historia de este evento desde sus inicios.
Para hacerse una idea de lo que era este país en los primeros años de ARCO, sólo hay que echar un vistazo a la foto de la segunda edición, celebrada en 1983, y analizar el parque móvil que recorría las calles de Madrid, en lo que puede denominarse como arqueología del contemporáneo.
Avanzando en las ediciones, el número de galerías presentes en ARCO se iba incrementando y, como consecuencia, el público empezaba a caer derrotado a media tarde, con síntomas de mareo y tiritona. Lo vemos en esta foto de 1992, donde IFEMA parecía un hospital de campaña:
ARCOmadrid 2022 habilita un espacio virtual donde echar un vistazo a numerosas galerías que muestran su obra, sin necesidad de acercarse IFEMA con los riesgos para la salud que comporta. Lo hace en ARCO E-XHIBITIONS, y presenta exposiciones creadas por las galerías participantes en ARCOmadrid y ARCOlisboa. Un tercer espacio, paralelo a los espacios físicos permanentes de las galerías y el espacio temporal que la feria ofrece. Será flexible y cambiante.
6. Rock y arte. 'Rock’n Roll Raiders World Tour'
Una apuesta por el más puro Rock'n Roll siguiendo de cerca los pasos de sus leyendas Angus Young, Brian Johnson, Stevie Young, Cliff Williams, Phil Rudd… AC/DC, en los más grandes escenarios del mundo. Esta muestra de gran formato no solo retrata a los grandes iconos del Rock internacional, sino que ha sido concebida como si de una gira de grandes estrellas de la música se tratara, un tour del que Madrid será su primer destino.
Abdul Vas retrata en Rock’n Roll Raiders World Tour a los músicos de AC/DC y las carreras de coches de la NASCAR. En palabras del artista “el proyecto empezó como si se tratase de grabar un álbum de rock y al finalizarlo salir de gira a tocar las nuevas canciones, pero en mi caso me encerré en el estudio durante 6 meses a pintar 16 cuadros de diferentes formatos, todos realizados en óleo sobre lino belga. Con el trabajo acabado ahora es el momento de llevar las obras a los recintos y estadios donde suelen tocar bandas legendarias como si se tratase de un verdadero concierto”.
La primera exposición será la de Madrid, en el Wizink Center. Las siguientes paradas de esta gira rockero-pictórica serán en Shanghai, París, Hong Kong, Miami y Tokio.
Exposición abierta al público sólo el 25 de febrero en cuatro pases (18:00, 19:00, 20:00 y 21:00 h) con entrada gratuita previa reserva aquí.
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