Casado no dimite, alarga la crisis y convoca al máximo órgano del PP para ganar tiempo

  • La Junta Directiva Nacional es el órgano más importante, con 300 representantes y con capacidad de convocar un congreso extraordinario. 
  • Fuentes 'populares' aseguran que 'la operación Feijóo ya está en marcha', mientras Díaz Ayuso le despeja el camino asegurando que su "sitio" está en Madrid.
  • DIRECTO | Sigue en directo la crisis interna del Partido Popular.
Pablo Casado, en el Congreso de los Diputados.
Pablo Casado, en el Congreso de los Diputados.
Europa Press
Pablo Casado, en el Congreso de los Diputados.
El presidente del PP, Pablo Casado, durante un acto de campaña.
EUROPA PRESS

Nueve horas de reunión tensa en el PP, sin dimisiones y con una única decisión: la convocatoria para el próximo martes, 1 de marzo, de la Junta Directiva Nacional, el máximo órgano de decisión entre congresos del partido y con capacidad para convocar un congreso extraordinario con un plazo máximo de 45 días. Este fue el saldo del Comité de Dirección celebrado este lunes por la cúpula del PP, donde el cierre de filas en torno a su presidente, Pablo Casado, no se produjo y la unidad del partido se fue resquebrajando conforme avanzó la jornada. "El partido está roto", sentencia sin matices uno de los diputados que desfiló por Génova 13.

El PP comunicará este martes el orden del día pactado para la Junta Directiva Nacional que incluya la convocatoria de un congreso extraordinario, una decisión que, de alargarse, podría suponer una oleada de dimisiones en la cúpula. Según ha podido saber 20minutos, Cuca Gamarra, Javier Maroto y Dolors Montserrat, los tres portavoces del partido en Congreso, Senado y Parlamento Europeo, respectivamente, se plantearían su renuncia si no se cumple este plazo.

Porque ni en la fecha hubo acuerdo: fijada inicialmente para el próximo lunes, la coincidencia con el Día de Andalucía provocó la queja del presidente de la Junta de Andalucía y líder del PP andaluz, Juanma Moreno. "No es acertado hacernos elegir entre el día de nuestra comunidad y la asistencia a un órgano del PP", manifestó, añadiendo que "las decisiones deben tomarse con tacto y sensibilidad en un momento tan crucial". Petición atendida.

Durante la reunión del lunes, fueron varios los cargos orgánicos que expusieron a Casado y al secretario general, Teodoro García Egea, sus discrepancias con el rumbo marcado por la dirección en esta crisis inédita y la poca viabilidad de capear el temporal sin dimisiones, sin una toma de decisiones contundentes. 

En definitiva, lo imposible de llegar en estas condiciones hasta el congreso ordinario de julio sin que nada cambie. La misma opinión con la que presionan los 'barones' del partido casi en su totalidad, muchos de los cuales apremiaron ayer públicamente a Pablo Casado para que tome medidas urgentes, en línea con el presidente gallego, Alberto Núñez Feijóo, a quien ya se ve como la única vía para saldar la crisis. En un mensaje que parecía coordinado con el del dirigente de la Xunta, la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, exigió dimisiones y aclaró que su "sitio está en Madrid". En todo caso, en estos días que faltan hasta la Junta Directiva se verán las fuerzas de unos y de otros.

Fueron pocos los que el lunes se privaron de opinar sobre el atolladero donde ha quedado atrancado el partido. Alejandro Fernández, presidente del PP catalán, pidió por Twitter "decisiones drásticas que den la voz afiliado", un sinónimo velado de congreso extraordinario. La líder 'popular' en Cantabria, María José Sáenz de Buruaga, exigió a Casado que solvente "ya" esta situación y que lo haga a través del "diálogo" en vez de "ahondar en la política de bandos". El valenciano, Carlos Mazón, "diálogo y generosidad". 

El presidente murciano, Fernando López Miras, es el único barón con mando en plaza que ha apoyado a Casado abiertamente. Los otros dos, Alfonso Fernández Mañueco y Juanma Moreno, castellanoleonés y andaluz, respectivamente, no terminan de consolidarse en público, si bien muchas fuentes consultadas por este periódico apuntan a una comunicación fluida con Feijóo.

Los intentos por buscar apoyos

Mientras tanto, la dirección del partido recopilaba partidarios. Teodoro García Egea junto al secretario de organización, Alberto Casero, intentaban recabar todos los apoyos posibles dentro de sus filas, lejos de claudicar ante la creciente discrepancia interna. Llamaron y convocaron a diputados, senadores y cargos provinciales de máxima confianza con los que afrontar la situación. Si bien el tráfico por el hall no fue intenso, algunos de ellos sí acudieron a mostrar su apoyo personalmente, como los diputados Edurne Uriarte, José Ortiz y Vicente Betoret, entre otros. La anécdota de la jornada fue la aparición circunstancial de la diputada 'popular' más díscola, Cayetana Álvarez de Toledo, que pasó por la calle Génova en dirección a su casa.

Uno de estos diputados afines a Casado asegura a 20minutos que ha visto al líder del partido "firme y fuerte". Ajeno a lo sucedido en el Comité de Dirección, expresa que entre la bancada 'popular' el apoyo sigue siendo extenso. Se trata de un sector que escurre la culpa apuntando directamente a Isabel Díaz Ayuso: "Quien detona el explosivo no es él, sino la otra parte".

Preguntado acerca de lo manifestado hoy por Feijóo, el diputado solo se adhiere a parte de su postura: "Yo me quedo con lo que dijo no hoy, sino días atrás, que no se puede ir a un congreso nacional con el partido dividido y desangrándose. El partido está roto, fragmentado, en caliente no se puede convocar un congreso".

En marcha la "operación Feijóo"

Desde este domingo, como ha podido saber 20minutos, Ana Pastor, vicesecretaria de Política Social y una voz de mucho fuste dentro del partido, mostró a Casado su oposición y la imposibilidad de apoyarle después de todo lo sucedido. A ella se habrían sumado el lunes la vicesecretaria de Acción Sectorial, Elvira Rodríguez, y la presidenta del Comité Electoral, Belén Hoyo, quien exigiría la dimisión de García Egea. Otras fuentes apuntan a otros miembros más, como Andrea Levy, la única participante de la reunión que abandonó la sede del partido a pie. "Unidad, unidad y unidad", fue el mensaje que lanzó.

Desde el sector opuesto del Grupo Popular en el Congreso se hace una lectura radicalmente opuesta. "Casado y Egea están actuando como si estuvieran en Nuevas Generaciones", describen estos dirigentes, que han vivido la jornada con "estupor" y con la sensación de que "la operación Feijóo ya se ha puesto en marcha".

Porque si el epicentro de la guerra civil del PP se manifiesta en Madrid, los taquígrafos apuntan directamente a Galicia y a su presidente, visto por muchos como la única alternativa para coger riendas del partido. Feijóo no confirmó los rumores que lo acechan, pero se expresó con retranca acerca del porvenir del partido. "Le corresponde tomar esa última decisión", avisó al líder de su partido. 

Una palabra -última- que podría suponer que el primer paso de Feijóo para pedir la dimisión de Casado, además de una declaración de intenciones: su desembarco definitivo en Madrid, tantas veces sopesado, tantas veces descartado. Por el momento, el presidente gallego ha pedido que se tomen "soluciones urgentes", aquellas que "deben volver a unir al partido".

"Mi opinión la sabe él (Casado), se la he dado de forma clara y nítida, pero no la voy a revelar por lealtad a él", manifestó, sin desvelar cuáles son las posturas intercambiadas por ambos líderes en privado.

"Se abre un escenario incierto que se tendrá que dirimir los próximos días porque nos estamos desangrando". Fueron las palabras con las que Ayuso inauguró la jornada y una biblioteca en Boadilla del Monte, en referencia a unas encuestas que ya reflejan una caída sin frenos del partido.

La presidenta madrileña, sin intención de rebajar la tensión, anunció que enviaría "sin esperar" a que se lo soliciten, "toda la relación de documentos con respecto a este contrato sobre el que se han arrojado insidias". Lo hará ante la Fiscalía, donde considera que la dirección de su partido la ha "arrastrado maliciosamente". 

Es precisamente ese contrato puesto en duda por Casado la semana pasada, y del que podría haberse beneficiado el hermano de la presidenta a través de una comisión, otra de las cosas que habría estado valorando Casado este lunes durante la reunión del Comité de Dirección para tratar de aguantar en su cargo. En concreto, unos contratos suscritos por la empresa Artesolar, vinculados a Tomás Díaz Ayuso. Según pudo saber 20minutos, Casado insistía en que estos contratos deberían ser revisados por la Fiscalía.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento