Los datos que revela la autopsia de Pablo Sierra: su muerte fue accidental y lo localizó un perro

Cartel en Badajoz con una fotografía de Pablo Sierra, desaparecido el pasado 2 de diciembre en la ciudad extremeña.
Cartel en Badajoz con una fotografía de Pablo Sierra.
EUROPA PRESS
Cartel en Badajoz con una fotografía de Pablo Sierra, desaparecido el pasado 2 de diciembre en la ciudad extremeña.
Pablo Sierra, el estudiante de 21 años desaparecido desde hace dos semanas y hallado sin vida en el río Guadiana tras una intensa búsqueda, murió de forma accidental, según ha confirmado su autopsia. La Policía ya trabajaba con esa hipótesis desde hace varios días tras analizar las imágenes de decenas de cámaras, tomar declaración a su entorno y a otras personas, y confirmar que la sangre hallada en su móvil era suya. Ni rastro de terceras personas.
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¿Qué le pasó a Pablo Sierra? En la ribera del río Guadiana ha sido hallado su cadáver, todavía a falta de confirmación en la autopsia. Además, el cuerpo ha sido localizado por un perro que participaba en el despliegue de la investigación, intensificada en las últimas horas. La Policía apunta a que Sierra falleció "por un fatal accidente" al equivocarse de camino cuando se dirigía a su residencia universitaria en Badajoz. "Esa es la línea más sólida", apuntan, y reiteran que lo ha sido "en todo momento". El caso, eso sí, se encuentra bajo secreto de sumario y los agentes aseguran que todavía "no se descarta nada".

El joven, estudiante de Medicina, fue visto por última vez en la calle Zurbarán de la capital pacense el jueves 2 de diciembre tras salir de copas con los amigos. Desde entonces se le buscaba por la zona del Pico del río Guadiana, tras encontrarse su teléfono móvil. Fueron sus dos hermanos quienes iniciaron la búsqueda, y llegaron a llamarle. Respondió entonces un guardia civil jubilado, que fue quien dio con el móvil del joven, dando las primeras pistas sobre el caso.

Han sido los canes de la Policía Nacional que rastreaban ese punto del río los que han detectado el cuerpo, han avisado con sus ladridos, y dos buzos lo han rescatado de debajo del agua, en una zona próxima a la orilla pero de abundante vegetación.

Desde las más de dos semanas de búsqueda la familia y los allegados de Sierra han insistido en que era un chico responsable, sin problemas de ningún tipo. Además, el día de su desaparición era el último que iba a pasar en Badajoz antes de irse a su pueblo junto a su hermano para pasar en casa el puente de la Constitución. De hecho, el tercero de los hermanos se había acercado a la ciudad extremeña precisamente para recoger a Pablo y a su otro hermano, que también se encuentra en la misma residencia universitaria.

Los familiares ya han recibido además las condolencias del presidente extremeño, Guillermo Fernández Vara. El jefe del Ejecutivo autonómico ha lamentado y que, a pesar de que podía "esperarse", es una noticia "dramática", por tratarse de un chico de 21 años cuya vida se ha visto "truncada" una noche que salió de su residencia de estudiantes para divertirse.

Desde el pasado martes efectivos del Grupo Especial Operativo (GEO) de la Policía Nacional habían retomado las labores de búsqueda en la zona conocida como El Pico, donde fue hallado el móvil en las primeras horas del viernes 3, poco después de que se denunciase su desaparición. Además, el miércoles se sumó a la búsqueda una unidad especializada canina, que ha sido finalmente clave en el hallazgo del cadáver. 

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