Fue a principios de julio cuando Irene Rosales anunció que dejaba Viva la vida y se alejaba, así, de la televisión, al menos por un tiempo. Tiempo que le ha venido bien para despejarse y apartarse de todo el barullo mediático, aunque no ha conseguido estar ajena a las cámaras de los reporteros.
Durante estos 4 meses fuera de su programa, la sevillana ha sido protagonista de rumores de ruptura con Kiko Rivera, supuestas infidelidades del DJ, recaídas en sus problemas de salud y, más recientemente, en una presunta crisis de pareja ocasionada por los papeles del matrimonio, que no fueron presentados el día de la boda.
Aunque ella aclaró que su marido no se lo había ocultado, sino que esto se debía solamente a un problema de tiempo y procesos burocráticos, algunos programas señalaban a un problema en su relación por esta 'no boda'.
La exconcursante de GH Dúo entró este fin de semana en Viva la vida para aclarar este asunto, momento que Emma García aprovechó para decirle que "siempre tendrá su silla" guardada por si quiere volver. "Ahora que hay público me lo podría pensar un poco más", respondió ella.
Parece que el programa de Cuarzo Producciones no pierde la esperanza de que Irene Rosales regrese, y ella no parece estar cerrada a ello. Pero, por si había alguna duda de la unión que siguen teniendo, el equipo de Viva la vida la ha querido obsequiar con un inesperado detalle que le han mandado a casa.
"¿Puedo querer más a mi programa? Detalles que me llenan de alegría. Os quiero compis siempre", escribió la mujer de Kiko Rivera mostrando el regalo que le habían mandado: un precioso centro de flores con frutas.
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