Durante estos últimos años, Emma Watson ha demostrado que es todo un icono en el mundo de la moda. La actriz ha encontrado el equilibrio perfecto entre lo transgresor y lo sofisticado, logrando siempre estar entre las mejores vestidas allá donde va y sin pasar desapercibida.
Sin ningún miedo a arriesgar con los colores, Watson sabe que es lo que más le favorece y, aunque en ocasiones recurra al blanco y negro, la intérprete de Hermione en Harry Potter arriesga con el diseño de sus conjuntos.
La última lección de estilo la ha dado en la gala de entrega de los Premios Earthshot, unos galardones que se otorgan anualmente desde 2021 hasta 2030 a cinco ganadores cada año, cuyas acciones hayan ayudado sustancialmente al medio ambiente. El premio es otorgado por la Royal Foundation y son concedidos por los duques de Cambridge.
En el evento, Emma Watson se transformó en una novia moderna con un top asimétrico con múltiples capas de tul blancas diseñado por Harris Reed. Siguiendo el compromiso medioambiental que caracteriza a la actriz, para hacer el top se reutilizaron los materiales de diez vestidos de novia de Oxfam.
La pieza principal la combinó con un pantalón negro de Stella McCartney -una diseñadora muy concienciada con la sostenibilidad y el bienestar animal- y botas de goma con plataforma, para hacer de su look algo más juvenil y no tan formal.
Sin duda, Emma robó toda la atención de la duquesa de Cambridge y se convirtió en una de las protagonistas de la noche, dando el ejemplo perfecto a las novias que buscan que su boda sea un día especial y que no quieran el típico vestido. Un look solo apto para las novias más atrevidas.
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