Fuentes policiales han detallado que los hechos tuvieron lugar el pasado 28 de septiembre sobre las 10,00 horas, cuando los agentes fueron alertados de un intento de robo en una vivienda. Tras desplazarse al lugar, encontraron en el interior del inmueble a los tres responsables de los hechos, que intentaron huir. Finalmente, estas personas fueron detenidas, aunque uno de los funcionarios resultó herido leve durante la actuación.

Asimismo, una mujer residente en el inmueble indicó que poco antes un hombre que portaba una sudadera con la que ocultaba su rostro había llamado a su telefonillo, pero ella había decidido no abrirle. Posteriormente, escuchó ruidos en la puerta de su domicilio y, a través de la mirilla, observó cómo una persona intentaba forzarla, por lo que comenzó a gritar para disuadirla.

Los gritos de esta mujer alertaron a sus vecinos, que observaron cómo tres hombres huían por las escaleras del edificio hasta ser interceptados por la patrulla. Así, los agentes detuvieron a estos varones, de los que uno contaba con antecedentes policiales en España, y les intervinieron un bote de engrasante antirruidos, un fleje plástico transparente y testigos de papel de color blanco, efectos utilizados para acceder a las viviendas.

Adicionalmente, se comprobó que uno de los detenidos presentaba pequeñas lesiones en las yemas de los dedos, donde había pegado trozos de piel de la palma de sus manos para ocultar sus huellas dactilares y evitar ser identificado.