La rebaja de medio punto del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) que prometió Isabel Díaz Ayuso ya ha pasado de su programa electoral al papel. El anteproyecto que reduce todas las escalas del tramo autonómico del impuesto ha sido sometido este martes a información pública, un periodo de exposición con el que echa a andar su trámite administrativo. La previsión es que este se complete en las próximas semanas y que la reforma tributaria entre en vigor el 1 de enero de 2022 con vigencia "indefinida". 

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La Dirección General de Tributos estima que el ahorro fiscal global será de 333,67 millones de euros para alrededor de 2,46 millones de declarantes del IRPF de los 3,38 millones que hay censados en la Comunidad de Madrid. Se quedarían fuera de la bajada, de acuerdo con la Comunidad, los que no tengan cuota íntegra -porque tenían cuota íntegra cero en 2018, que es el ejercicio que se ha tomado como referencia-, así como aquellos que solo tengan rendimientos del capital mobiliario y ganancias y pérdidas patrimoniales que formen parte de la base liquidable del ahorro. 

En la memoria que acompaña el anteproyecto de ley, al que se pueden realizar alegaciones hasta el 12 de octubre, la Consejería de Economía y Hacienda afirma que esta bajada de impuesto se pone en marcha para "ayudar" a los madrileños a "superar la crisis económica provocada por la pandemia".

"La rebaja de la escala autonómica dotará de mayor disponibilidad de dinero y liquidez, y, en definitiva, de capacidad de gasto y ahorro a los contribuyentes", afirma el texto redactado por el Gobierno autonómico. "Supondrá una dinamización de la actividad económica, así como un mayor incentivo a la inversión, el ahorro y el consumo de los ciudadanos madrileños", se agrega.

Lo cierto es que la rebaja de medio punto en el IRPF es una promesa que ya hizo Díaz Ayuso en las elecciones autonómicas de 2019, las primeras a las que se presentó. La pasada legislatura, el estallido de la pandemia complicó los planes legislativos del Ejecutivo, por lo que esta reforma tributaria se aparcó. En la pasada campaña electoral, la entonces candidata del PP a revalidar el cargo volvió a prometer la bajada impositiva a los madrileños, y tras ganar el 4-M  aseguró que estaba entre sus prioridades y se materializaría en enero de 2022. 

El Gobierno regional calcula que los 333,67 millones de euros al año que dejará de ingresar por esta bajada de la Renta llegarán a las arcas públicas por otras vías y en mayor cantidad. "La experiencia en la Comunidad de Madrid ha demostrado que la reducción ordenada y coherente de tributos genera mayores ingresos públicos debido a la ampliación de las bases imponibles y a la mayor dinamización de la actividad económica", defiende la memoria de la Dirección General de Tributos.