Un palestino de 15 años murió esta madrugada por un disparo en la cabeza del Ejército israelí durante una redada en Cisjordania ocupada, informó el Ministerio palestino de Sanidad.

El Ejército de Israel indicó en un comunicado que "respondió con fuego" a disparos realizados desde los tejados y a un intento de lanzamiento de un objeto "durante una misión" para detener a un sospechoso.

El hecho tuvo lugar en el campo de refugiados de Balata, en Nablus, y el Ministerio palestino identificó al menor como Kaled Saleh quien murió en el hospital tras ingresar de gravedad por la herida de bala.

"Durante los disturbios, varios soldados localizaron a un sospechoso en un tejado que sostenía un gran objeto en sus manos, tratando de arrojarlo a un soldado que estaba debajo del edificio. Uno de los uniformados respondió con fuego real y se identificó un impacto", desarrolló en un comunicado castrense.

La semana pasada, cuatro palestinos murieron durante una operación de búsqueda y captura del Ejército israelí en el campo de refugiados de Yenín, en el norte de Cisjordania ocupada.

Los residentes suelen enfrentarse a los uniformados israelíes cuando se producen este tipo de operaciones israelíes en territorio palestino ocupado.

El Ejército israelí añadió que "la operación (de esta madrugada) se completó y la persona sospechosa de estar involucrada en actividades terroristas fue detenida", y que no hubo heridos entre sus filas.