El vuelo, programado para julio de 2020, sufrió una modificación de horarios en abril de ese mismo año que suponía un retraso de dos horas y que obligó a la cliente a la cancelación por "problemas para realizar su viaje con normalidad", según ha indicado Facua en un comunicado.

Por este motivo, la usuaria pidió a la compañía el reembolso de los billetes, porque en su web se recoge que "si cambia el horario de un vuelo y el pasajero no puede aceptar la nueva salida, tiene derecho a solicitarlo". La propia aerolínea, además, "había indicado la cliente en un correo electrónico que podía solicitar la devolución ya que la modificación era de más de dos horas", según Facua.

Del mismo modo, reclamó que se le abonasen los billetes Viena-Dublín por no tener razón de ser si no iba a realizar el primero. Sin embargo, "la aerolínea nunca llegó a entregarle el importe de ninguno de los billetes".

Ante esta situación, la usuaria decidió acudir a Facua Sevilla para que ejerciera acciones en defensa de sus derechos. El equipo jurídico de la asociación se dirigió a Ryanair para instarle a que cumpliera con su compromiso de devolver los billetes.

Sin embargo, la compañía tampoco dio respuesta a la reclamación, por lo que la asociación volvió a contactar. Finalmente, tras las reclamaciones, la compañía ha informado del reembolso del precio de los billetes de ambos trayectos.