Un menor de edad murió este martes ahogado cuando se bañaba con un grupo de amigos en las lagunas de Ambroz, ubicadas en el distrito madrileño de San Blas-Canillejas.

El chico, de unos 16 años y originario Mali, había desaparecido cuando se estaba bañando en una de las balsas junto a un grupo de unos ocho menores, según informaron a Europa Press fuentes policiales.

Los primeros indicios recabados en el lugar apuntan a que el menor no nadaba muy bien y, en un momento determinado, se hundió en el agua. Los amigos que estaban junto a él cuando ocurrieron los hechos perdieron el contacto con el chico y alertaron a los servicios de emergencia.

Efectivos de Bomberos del Ayuntamiento de Madrid estuvieron desde el primer momento trabajando en el rastreo superficial de la zona. Por su parte, buzos del Grupo Especial de Operaciones (GEO) de la Policía Nacional efectuaron varias inmersiones en el agua.

Finalmente, los efectivos policiales localizaron el cadáver del menor en el interior de las lagunas, en un recóndito paraje de difícil acceso situado entre los distritos de San Blas-Canillejas y Vicálvaro y el municipio de Coslada.

En el lugar también se desplegó un dispositivo del Samur-Protección Civil, informó fuentes de Emergencias Madrid.

En 2018 falleció otro joven de 21 años en estas mismas al ahogarse cuando se bañaba en estas mismas lagunas, muy cerca de la M-40. Anteriormente ya había fallecido un niño de 12 años en 2012, también por ahogamiento.

Las lagunas o pozas de Ambroz, donde está prohibido el baño, y que se encuentran entre la M-40 y la R-3, surgieron como resultado de una explotación de una mina de sepiolita.

La empresa minera Tolsa está a la espera de que la Comunidad le renueve los permisos para retomar la explotación minera, mientras que Ecologistas en Acción han pedido a la Consejería de Medio Ambiente que no lo autorice porque las pozas son ahora un sitio que da refugio a medio centenar de especies de aves, informa Efe.

Estas pozas tienen hasta 25 metros de profundidad en algunas zonas.