La investigación de la estafa comenzó el día 24 de febrero del pasado año, cuando una persona presentó denuncia en el Puesto Principal de la Guardia Civil de Tarancón por una supuesta estafa bancaria a través del método denominado 'Phising', en la cual, mediante llamada telefónica al perjudicado, los autores de los hechos haciéndose pasar por trabajadores de banca, y alertando al perjudicado con supuestos cargos fraudulentos a su cuenta bancaria, consiguieron obtener además de sus datos personales, las claves del perjudicado, según ha informado la Guardia Civil en nota de prensa.

Una vez obtenidos los datos personales, los autores consiguen acceder a la banca electrónica de la víctima, realizando múltiples operaciones y transferencias bancarias desde dicha cuenta, siendo el perjuicio económico sufrido de unos 33.000 euros.