Los agentes les han imputado una infracción grave y la responsabilidad civil como presuntos autores del graffiti. Al localizar a los jóvenes, éstos iniciaron trataron de huir, lo que dio lugar al inicio de una persecución, ha informado el Ayuntamiento de Alicante en un comunicado.

Los policías han detenido a dos de ellos y han identificado a los otros dos. Además, ha incautado los botes de spray y diverso material.

Los hechos han ocurrido este sábado sobre las 19.10 horas, cuando una patrulla de la unidad Fox que realizaba labores de vigilancia dentro del plan anitibotellón frente a la Covid, observó a cuatro personas que realizaban una pintada de grandes dimensiones en la parte lateral que da acceso a la fortaleza del Castillo de San Fernando, en Camino de Ronda.

Al constatar que habían sido descubiertos, los grafiteros comenzaron la huida. Por tales hechos, los agentes procedieron a identificarlos. Uno de ellos era un joven fugado de un centro de menores de la provincia de Alicante.

Los agentes han impuesto denuncias a los cuatro jóvenes por una infracción grave a la Ordenanza de Limpieza, que prohíbe la realización de toda clase de pintadas en cualquier espacio de la vía publica, y por dañar parte del patrimonio histórico de la ciudad.

La Policía ha instruido diligencias para el atestado judicial. La unidad especializada policial, que cuenta con peritos expertos en grafística y un equipo de agentes, será la que cuantifique los daños producidos para cursar las correspondientes denuncias.

Los agentes también han realizado las mediciones de las pintadas y los datos producidos en este acto vandálico y, posteriormente, han trasladado al centro de menores a uno de ellos.

La Policía recuerda que realizar pintadas es una infracción que está catalogada de carácter grave en la ordenanza y que conlleva sanciones de 780 euros.