Según ha explicado el Ayuntamiento en un comunicado, los hechos ocurrieron durante la tarde del jueves en la plaza de la Viña de Alicante, cuando los agentes de la Unidad Fox, en los dispositivos de vigilancia diarios para hacer frente a la pandemia, localizaron este establecimiento, al parecer, ilegal.

Los policías inspeccionaron el local y comprobaron que carecía de la obligatoria licencia y atendía al público sin ninguna autorización para estar ejerciendo varias actividades.

El local actuaba como peluquería, barbería, hacía tatuajes y academia. También tenía un servicio de bar y venta de refrescos y bebidas alcohólicas, así como otros productos. Los agentes localizaron una sala de espera anexa habilitada para jugar a la playstation sin ninguna medida de seguridad.

Tras la inspección se levantó un acta por una infracción grave y los agentes procedieron al cierre de este establecimiento, que se enfrenta a una infracción grave con multas de 601 a 30.000 euros y acumulativamente hasta 300.000 euros.