Los policías fueron requeridos ya que se estaba celebrando una fiesta que incumplía la normativa actual sanitaria, por lo que los agentes se personaron en el lugar, en una vivienda del barrio de Pajarillos, y comprobaron, desde el exterior de la vivienda, que había una concentración elevada de personas en un domicilio con la música a gran volumen.

Uno de los moradores, que no llevaba mascarilla, abrió la puerta a los funcionarios, quienes le indicaron que debían salir los asistentes del interior de la vivienda por incumplimiento de las medidas sanitarias establecidas. El hombre, tras entregar su documentación personal, intentó propinar varios puñetazos a uno de los policías y llegó a agarrarle fuertemente del brazo y cerrar fuertemente la puerta de la vivienda.

Finalmente, tras una larga conversación se consiguió que el agresor saliese voluntariamente del interior del domicilio, por lo que fue detenido por atentado a un agente de la autoridad y otros nueve asistentes fueron propuestos para sanción administrativa.

La detención fue practicada por agentes de la Brigada Provincial de Seguridad Ciudadana.