Los beneficios de algunos minerales en la piel son muy conocidos desde la antigüedad, no en vano, los egipcios y los romanos utilizaban el zinc para tratar distintas afecciones cutáneas.

En la actualidad, este mineral lo podemos encontrar en lociones o polvos de calamina, cuyas propiedades son aliviar y calmar la piel, disminuyendo las rojeces, inflamaciones y heridas que podamos tener..

En la cosmética es usual encontrarla en cremas y lociones para tratar el acné ya que ayuda a deshacerse de él manera segura y, sobre todo, no deja ninguna marca de la espinilla en nuestra piel.

Al tener también propiedades astringentes, ayuda en la regulación del sebo de la piel, evitando así un exceso de grasa y que se taponen los poros, una de las principales causas de la aparición del acné.

La calamina acostumbra a ir acompañada de AHAs o BHAs para ayudar a calmar la irritación que pueden ocasionar estos ácidos en la piel y a disminuir las imperfecciones que se encuentren en nuestra dermis.

En cuanto a la presentación de este ingrediente, suele venir en cremas o lociones, y en el caso de estas últimas, se aplica directamente en el granito. La mejor hora del día es aplicarla por la noche para que penetre en la piel durante las horas de sueño y por la mañana se pueda notar su efecto.