El ministro de Sanidad, Salvador Illa, y el consejero madrileño, Enrique Escudero, están ya reunidos en la sede del Ministerio para estudiar las medidas en la Comunidad de Madrid y para intentar rebajar la tensión entre ambos gobiernos de los últimos días debido a su desacuerdo entre cómo afrontar la escalada de l pandemia en la región.
Después de la tensión de todo el fin de semana, de que el Gobierno advirtiera que intervendrá Madrid y de que la Comunidad de Madrid se reafirmara en sus medidas, Illa y Escudero se han reunido a primera hora de la tarde a solas junto a sus equipos para abordar las medidas tomadas" en la Comunidad, según ha informado el Gobierno central. Ninguna de las dos partes confirma por el momento si presentará alguna propuesta distinta a la que cada uno ha defendido hasta ahora y finalmente no habrá una comparecencia conjunta del ministro y el consejero al final de la reunión, una opción que los enlaces del Gobierno central y el autonómico exploraban este lunes. Finalmente, Moncloa ha informado que Illa dará cuentas de la reunión en La Moncloa, junto con el director del CCAES, Fernando Simón.
En principio, estaba previsto que el 'Grupo Covid' -del que forman parte Illa, Escudero y la ministra de Política Territorial, Carolina Darias, y el vicrepresidente madrileño, Ignacio Aguado- se reuniera este martes. El encuentro anunciado para este lunes supone adelantar el análisis de las medidas tomadas en Madrid, además en un grupo reducido, Escudero y sus respectivos equipos. Fuentes del Ejecutivo señalan que, en caso de tomarse, no está previsto que haya ninguna decisión referente a Madrid hasta este martes.
En encuentro se produce justo el día en el que han entrado nuevas restricciones de movimientos en la Comunidad -en ocho áreas sanitarias que elevan el total a 45- y en medio de una formidable tensión entre el Gobierno y la Comunidad por qué tipo de medidas hay que tomar para frenar los contagios. Con todo y aunque cada una de las partes continúa en sus posiciones, en las últimas horas se han escuchado mensajes más conciliadores que los que se desencadenaron el pasado viernes. El Gobierno mantiene que espera un cambio de actitud por parte del Ejecutivo madrileño para no tener que tomar el control en la Comunidad y el Gobierno de Isabel Díaz Ayuso se ha abierto a estudiar rebajar la ratio de 1.000 a 500 contagios por cada 100.000 habitantes como la señal para decretar restricciones, aunque mantiene que debería ser en toda España por igual y que el confinamiento no es la solución.
El Gobierno central insiste en que las medidas anunciadas el viernes y que han entrado en vigor este lunes son "insuficientes", que la pandemia en Madrid está en un momento muy preocupante y nos esperan "semanas muy duras". Por eso, cree que hay que cerrar Madrid y establecer confinamientos perimetrales en todos los municipios de la región con una incidencia superior a 500 casos por cada 100.000 habitantes.
Por su parte, Díaz Ayuso reiteraba este domingo por la noche que Madrid no se puede cerrar, por las repercusiones económicas que eso tendría, y se mostraba dispuesta estudiar una solución "intermedia". Fuentes de su Gobierno mantienen que "los problemas no se solucionan confinando". Este martes, además, empiezan a hacerse los tests de antígenos en Vallecas.
Medidas en Madrid
A pesar de las críticas que está recibiendo por la gestión de la pandemia, fuentes del gobierno madrileño recuerdan que cada día los médicos madrileños hacen seguimiento domiciliario de 16.000 pacientes con Covid, que si en un colegio se avisa de un contagio hay dispositivos móviles que se desplazan hasta allí para hacer tests de antígenos y que la Comunidad dispone ya de 1.300 rastreadores, a falta de que empiecen a trabajar los rastreadores militares.
Desde el Gobierno de la Puerta del Sol recuerdan también que se han desconvocado dos huelgas de médicos y que están al habla con los farmacéuticos para ver si ellos pueden ayudar a hacer tests, tal y como estos profesionales llevan meses reclamando.
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