El contenedor marrón de materia orgánica llegará durante el segundo semestre de 2020 a toda la ciudad de València, tras extenderse a los 25 barrios y 16 pueblos (o pedanías) que todavía no tienen implantado este método de separación y reciclaje de residuos urbanos. De este modo, una vez se implemente la fase III B, se pasará del 70% actual al 100%, al incorporarse a este sistema los 235.764 habitantes del término municipal que todavía no disponen del mismo.

Según ha explicado este miércoles el vicealcalde y concejal de Ecología Urbana, Sergi Campillo, el final de este proceso paulatino de extensión del contenedor marrón permitirá cubrir distritos como el de Ciutat Vella, Pobles del Nord y Pobles del Sud, además de otros enclaves de l'Eixample, Extramurs, Pla del Real o Algirós. 

La Junta de Gobierno Local aprobará este viernes la última fase de un proceso que arrancó en 2016 con un proyecto piloto en Benimaclet y Sant Marcel·lí y que, desde entonces, se ha ido llevando a más zonas de la ciudad.

La extensión del contenedor marrón se realizará en estos barrios con la metodología utilizada a finales de 2019 y que consiste en reorganizar los contenedores en las calles en islas de reciclaje en las que se agrupan, como mínimo, tres de estos depósitos (marrón de materia orgánica, amarillo de envases y gris de fracción resto). 

Adicionalmente, se pueden añadir contendores azules de papel-cartón y el verde de vidrio, aunque estos últimos se dejarán preferentemente cerca de bares y restaurantes, ya que son los grandes consumidores de este componente.

De este modo, se pasa de tener contenedores sueltos en las calles a agruparlos en conjuntos, para facilitar la separación de los residuos a la hora de depositarlos. Esta reorganización conlleva la supresión de zonas de aparcamiento y la creación de otras nuevas en los lugares donde se mueven contenedores.

Para informar sobre las nuevas ubicaciones, el Ayuntamiento ya ha empezado a enviar cartas a asociaciones vecinales y administraciones de fincas para que, en su caso, realicen alegaciones. Una vez resueltas, a finales de octubre, el servicio de Recogida de Residuos empezará a señalizar las nuevas islas de contenedores y avisará con pegatinas sobre el movimiento de depósitos y su ubicación definitiva.

El Consistorio enviará, además, cartas a todos los domicilios de los 25 barrios y 16 pueblos en los que se realizará esta reorganización para avisar de la misma y explicar sus pormenores.

Remolques con limitación horaria en Ciutat Vella

El Ayuntamiento de València va a poner en marcha también en la segunda mitad del año un proyecto piloto en Ciutat Vella para instalar remolques con todas las fracciones de reciclaje durante dos o tres horas al día en algunos barrios del distrito. Esta iniciativa persigue disminuir el impacto visual y paisajístico que puede tener llenar de islas de contenedores calles estrechas del casco histórico, donde pueden tener difícil encaje.

Según ha adelantando el vicealcalde Campillo, en principio se van a colocar 15 unidades de estos remolques. "Cuando hagamos la evaluación del proyecto decidiremos si finalmente esa situación se extiende a toda Ciutat Vella, o solo a unos barrios, ya que no es lo mismo el del Carmen que el Mercat, por ejemplo", ha afirmado.

Campaña informativa y presupuesto

Además, se realizará una campaña informativa a pie de calle con personal que también impartirá educación medioambiental. Se han programado 124 jornadas de este tipo y, como en ocasiones anteriores, se repartirán kits de reciclaje que en esta ocasión incluirán una malla para hacer la compra que busca evitar el uso de bolsas de plástico.

El presupuesto de esta última fase de la extensión del contenedor de materia organánica y la reorganización de contenedores asciende a 1,11 millones de euros. Además, prevé un impacto de 5 millones de euros en las cuentas de 2021 y siguientes, ya que, al haber un contenedor más, se incrementan los gastos de recogida y gestión de estos residuos, ha explicado Campillo.