Las autoridades de Uganda han anunciado este viernes la detención de cuatro cazadores furtivos por su presunto papel en la muerte de Rafiki, uno de los últimos gorilas de montaña más famosos de ese país, cuya especie está en grave peligro de extinción y de la que solo quedan un millar de ejemplares.

La Autoridad de Fauna Salvaje de Uganda (UWA) ha detallado en un comunicado que las detenciones tuvieron lugar en el sector sur del Parque Nacional de la Selva Impenetrable de Bwindi por su presunto papel en la muerte de Rafiki.

"Los arrestos tuvieron lugar tras investigaciones en torno a la muerte del espalda plateada por parte de nuestro personal, a raíz de un informe postmortem que reveló que sufrió una herida con un objeto punzante que penetró la parte superior del abdomen y alcanzó sus órganos internos", ha señalado.

Así, ha indicado que uno de los sospechosos, al que se le han incautado materiales de caza, ha confesado haber matado al gorila "en defensa propia" tras acudir a cazar al parque. "Cuando el espalda plateada cargó contra ellos, le clavó una lanza", ha señalado.

"Los cuatro sospechosos se encuentran en la comisaría de Policía de Kisoro esperando juicio en un tribunal", ha manifestado. El gorila fue dado por desaparecido el 1 de junio y hallado un día después en los terrenos del parque nacional.

En el momento de la muerte de Rafiki, el grupo Nkuringo, el primero en habitar el sector sur del parque, contaba con 17 miembros, entre ellos ocho hembras adultas, dos adolescentes y tres crías.

"La UWA está monitorizando al grupo para garantizar que está preparado para el turismo cuando el parque abra al público", ha indicado el organismo. 

El Parque Nacional de la Selva Impenetrable de Bwindi, creado en 1991, se encuentra en el suroeste de Uganda, cerca de la frontera con República Democrática del Congo (RDC). Al otro lado de la misma está ubicado el Parque Virunga, uno de los más importantes de África.