Así lo ha avanzado el concejal de Servicios Públicos y Seguridad, Andrés Licerán, en declaraciones a Europa Press, en las que ha anunciado que esta semana se mantendrá un reunión con la empresa responsable de la zona azul, que se desactivó al comienzo del estado de alarma a mediados de marzo, para decidir si se retoma el cobro de este servicio, una vez que ya funciona también el autobús urbano con normalidad.

Cabe recordar que la razón por la que se suprimió entonces la zona azul era para "desincentivar el uso del transporte público", ya que la recomendación ante la crisis sanitaria era el desplazamiento en vehículos particulares para evitar la propagación del coronavirus en servicios públicos.

En aquel momemto, en materia de movilidad y seguridad ciudadana también se aplazó la puesta en marcha del nuevo radar móvil que iba a empezar a funcionar el 17 de marzo. Se trata de un dispositivo que funcionó durante las dos primeras semanas de marzo en fase de pruebas y estaba previsto que comenzase a multar en la segunda quincena, pero todos los agentes de la Policía Local centraron sus esfuerzos en la lucha contra el coronavirus y se aplazó su puesta en marcha. Ahora, el nuevo radar funciona ya desde hace "dos o tres semanas", según ha confirmado el edil.

Debido al estado de alarma y a la desescalada del confinamiento de la población, el Consistorio cacereño diseñó un plan extraordinario de movilidad que se ha ido flexibilizando según se iba pasando de fase. Desde este lunes se han abierto al tráfico todos los carriles de la avenida de España que se habían peatonalizado, los dos de cada sentido para favorecer el comercio local de la zona.

Sin embargo, seguirá prohibido aparcar en las líneas de aparcamientos externas de la avenida para que el peatón aún siga disponiendo de más espacio para mantener una distancia de seguridad adecuada con el resto de personas. Asimismo, las calles San Antón, Clavellinas y Parras continuarán cortadas al tráfico rodado pero se permitirá la circulación de los autobuses urbanos.

También se ha empezado a desmontar el corredor saludable de la zona norte y el del Santuario de La Montaña, debido a que ha bajado la afluencia de usuarios. Por último, se ha abierto el segundo carril de la avenida de Alemania desde la plaza de América hasta la rotonda de Renfe, pero se mantendrá aún cortado el carril desde esa rotonda hasta el recinto ferial.