Los hechos se produjeron la semana pasada, según información municipal, cuando agentes de la Policía Local "requisaron un perro considerado de raza potencialmente peligrosa a una persona indigente extranjera que se encontraba en la calle Ería del Hospital, en Pola de Siero junto al animal que estaba suelto y sin bozal".
Los agentes se personaron en la calle tras las reiteradas quejas de los vecinos, tanto a este cuerpo, como a la Policía Nacional, tal y como recoge el informe policial.
"Tras requerirle documentación, tanto de él como del can, el hombre se negó y forcejeó con los agentes. Finalmente fue detenido y trasladado a las dependencias de la Policía Nacional de Siero por resistencia y desobediencia a la autoridad", indican desde el Consistorio.
El animal fue decomisado y trasladado a un veterinario que determinó que el perro, mestizo, es de raza potencialmente peligrosa por sus características físicas. A pesar de que el perro estaba con la vacunación en regla y tenía chip identificativo, su dueño no tenía licencia de tenencia PPP, ni acreditó estar al corriente del seguro de responsabilidad civil por daños a terceros. Por tanto, y a pesar de haber reclamado al can tras ser puesto en libertad, el perro se le ha requisado y actualmente se encuentra en al centro canino de La Ería de Llanes, actual adjudicataria del contrato municipal de recogida de animales.
El decomiso del animal ha sido trasladado al Servicio de Sanidad y Producción animal, dependiente de la Consejería de Desarrollo Rural, Agroganadería y Pesca, que tiene las competencias sobre el régimen jurídico de la tenencia de animales potencialmente peligrosos en el Principado.
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