Así lo ha trasladado la conselleira de Medio Ambiente, Territorio e Vivenda, Ángeles Vázquez, en el encuentro telemático mantenido con los delegados territoriales de la Xunta en A Coruña, Ovidio Rodeiro, y en Pontevedra, José Manuel Cores Tourís.

En la videoconferencia, el departamento de Medio Ambiente de la Administración autonómica ha inforado a los delegados provinciales sobre los trabajos de conservación y mantenimiento de espacios naturales acometidos durante el estado de alarma, según informa la Xunta.

De este modo, a partir de la próxima semana, el Gobierno gallego prevé "empezar a retomar la actividad normal" en los parques naturales de las provincias atlánticas, que podrían reabrirse al público a partir del 11 de mayo si Sanidad dá el visto bueno a que A Coruña y Pontevedra pasen a la 'fase 1' del plan de transición hacia la bautizada como 'nueva normalidad'.

Así, los parques de As Fragas do Eume, Coorrubedo e Lagoas de Carregal e Vixán en la provincia de A Coruña; y Monte Aloia en Pontevedra quedaría abiertos al público de nuevo si el Ejecutivo central autoriza el pase de las zonas a la nueva fase.

Según detalla la Xunta en un comunicado, Ángeles Vázquez ha demandado al Gobierno estatal "que clarifique cuantes antes" cuántos visitantes estarían permitidos y en qué franjas horarias podrían acudir a estos parques y sus centros de interpretación.

Además, la conselleira ha señalado que el pasado miércoles remitió una carta a la ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, en la que solicita aclaraciones sobre "cómo va a afectar la siguiente fase a los accesos al Parque Nacional das Illas Atlánticas de Galicia".

TRABAJOS EN LOS PARQUES

Según expone la Xunta, a lo largo de las últimas semanas y coincidiendo con el período del estado de alarma por el coronavirus, se han llevado a cabo trabajos de conservación, señalización y limpieza en estos parques naturales.

En la provincia de A Coruña, fueron desbrozadas 1,87 hectáreas de monte, además de otros trabajos como la retirada de árboles, tareas de señalización y de limpeza del entorno.

Por su parte, en el Monte Aloia, único espacio de la provincia de Pontevedra con la etiqueta de Parque Natural, los trabajos de conservación consistieron en desbroces y rozas en zonas de maleza, retirada de árboles de los caminos o mejoras en la señalización.