La suavidad del invierno, con ausencia de fuertes heladas que provocan placas de hielo y la falta de precipitaciones abundantes de nieve, que no han necesitado del trabajo habitual de los quitanieves, ni del empleo de grandes cantidades de sal, han propiciado esta reducción en la campaña invernal.

En este sentido, durante la campaña de viabilidad invernal ha extendido 872.500 kilos de sal, se han gastado 14.486 litros de gasoil y las quitanieves han hecho un total de 28.988 kilómetros.

Una reducción sustancial en comparación con la pasada campaña, donde se extendieron 1.345.000 kilos de sal y las quitanieves recorrieron 42.439 kilómetros.

En relación a la última década, el invierno más crudo fue el de 2017-18 donde se llegaron a repartir más de tres millones de kilos de sal y las quitanieves recorrieron casi 90.000 kilómetros.

La campaña de 2017-2018, junto con la del invierno de 2012-13, fue la que más trabajo ocasionó durante al operativo que, como todos los años, pone en marcha la Diputación de Soria para mantener limpias las carreteras provinciales.

En cuanto a los inviernos más suaves, como el actual, hay remontarse a la campaña 2011-12, hace nueve años, que fue el invierno donde se registró la menor intervención de los efectivos de limpieza de nieve de las carreteras sorianas, donde solo se consumieron 11.800 litros de gasoil, se extendió medio millón de kilos de sal y las quitanieves solo tuvieron que recorrer 24.450 kilómetros haciendo su trabajo.

La campaña de vialidad invernal de la Diputación de Soria dispone de una treintena de operarios coordinados desde el parque de maquinaria del departamento de Vías y Obras que cada invierno moviliza a catorce quitanieves, así como un tractor con fresadora y un camión con cuña y esparcidor de sal.