El Gobierno vasco ha rectificado una orden anterior que impedía a las tiendas de golosinas abrir durante el estado de alarma por el coronavirus y ha remitido nuevas instrucciones a la Ertzaina y las policías locales para que no multen a ese tipo de comercios.

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Según publica el diario El Correo Vasco, estos comercios minoristas no podían abrir en la comunidad autónoma vasca al considerarse que no vendían productos de primera necesidad, una condición establecida por el decreto del estado de alarma. Cuando encontraban uno abierto, los agentes procedían a su cierre forzoso y a la imposición de una multa.

Sin embargo, el pasado 8 de abril la Autoridad Vasca de la Competencia publicó un informe que señalaba que esa interpretación carecía de fundamento legal y que su cierre forzoso causaba "una discriminación injustificada entre competidores", informa el diario.

Son tiendas de alimentación

Los locales de confitería y golosinas son tiendas de alimentación a efectos fiscales y estadísticos, indicó la autoridad, y su cierre no ha sido ordenado específicamente por ningún decreto, por lo que no hay razones para hacer una interpretación de la norma. 

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Con todo, estos locales están muy afectados por la falta de niños en la calle. Una medida, la de permitir que los menores puedan salir del confinamiento, que diversos sectores llevan demandando semanas.

También la industria de la golosinas está sintiendo los efectos del parón económico, pues varias empresas distribuidoras han tenido que hacer expedientes temporales de regulación de empleo.