En un comunicado este jueves, la policía catalana ha explicado que los hechos se remontan a la noche del 6 de abril, cuando los Mossos tuvieron conocimiento de que se había producido un robo con fuerza en un concesionario de vehículos de Girona, donde los ladrones habían sustraído un turismo.

Con el vehículo robado, los detenidos realizaron dos empotramientos en dos farmacias, una en Blanes y otra en Palafolls (Girona), y en uno de los robos intimidaron con un arma de fuego a uno de los trabajadores que estaba realizando el cierre del negocio.

La madrugada del 7 de abril se produjeron dos nuevos empotramientos con el mismo un patrón operativo, uno en un supermercado de Granollers (Barcelona) y otro en una farmacia de Girona.

Los investigadores identificaron a una parte de los asaltantes que habían participado en los cinco robos y que forman parte de un grupo criminal más numeroso especializado en realizar empotramientos, y los detuvieron el 9 de abril en sus domicilios.

Los dos arrestados pasaron a disposición judicial el 10 de abril, cuando el juez decretó prisión provisional, y la operación continúa abierta y no se descartan más detenciones.