Lo que a priori iba a ser una buena noticia y un motivo de alegría para el programa Sálvame acabó convirtiéndose en una bronca que montó Belén Esteban, ofendida y cargando contra el director del programa. 

La presentadora del programa, Carlota Corredera, reunía en el centro del plató a los colaboradores del espacio de Telecinco para informarles de que "una conocida marca de mayonesa ha puesto en marcha un concurso para buscar la mejor ensaladilla rusa de Europa” y les revelaba que Sálvame enviará a un representante a ese concurso cuya final se celebrará en Rusia. 

Todos los colaboradores se mostraban ilusionados, menos Belén Esteban, que ponía cara de enfado. "¿Te pasa algo, Belén?", preguntaba Corredera. Esteban, con una actitud combativa poco entendible, se iba hacia la parte de atrás de las cámaras diciendo "Alberto, porque te quiero no voy a decir lo que pienso en este momento". 

Y continuaba, lanzada: "Encima que me pasé una mañana entera... yo hago bien la ensaladilla, le traje un tupper, le grabé todo el proceso para que viera que no lo había comprado". 

Sin dar turno para la réplica y ante las risas de sus compañeros, ella siguió espetando: "El truco yo lo tengo en la mahonesa que me la ha enseñado mi madre". "Porque te conozco... ¡No voy a dar mi receta!". 

¡En cuanto he visto mahonesa y ensaladilla he dicho 'esto va para Belén Esteban'", decía la colaboradora, convencida de que todo era un ardid para conseguir su receta "¡Que te conozco!", se dirigía hacia el director. 

También hubo reproches para la propia Belén, pues Corredera le dijo que la conoce desde el año 2000 y "no sabía que haces bien la ensaladilla". 

"¡Os vais a enterar, os vais a hacer los filetes rusos quien yo os diga!", acababa gritando Esteban. 

Y sin embargo, todo resultó en vano, pues la colaboradora elegida para representar a Mediaset fue Lydia Lozano, a pesar de lo cual fue Belén Esteban quien acabó cocinando en directo una ensaladilla rusa, pues ella será la artífice del plato y Lozano la enviada al concurso, dado que no se veía capacitada, porque "no es mi plato".