¿Es posible hacer una exposición de arte sin las obras físicas? Esta es la pregunta a la que intenta dar respuesta Intangibles, la última propuesta expositiva del Espacio Fundación Telefónica de Madrid. La institución se embarca estos días en un proyecto novedoso, experimental e inmersivo que generará, sin duda, todo tipo de opiniones encontradas sobre lo qué es o no es una exposición y que toma como punto de partida la reinterpretación de varias obras emblemáticas de la Colección Telefónica.

"Se trata de un proyecto diferencial que convierte al espectador en el centro del proyecto y que se nutre de la tecnología para enriquecer su experiencia de acercarse al arte", señalaba Pablo Gonzalo, responsable de Cultura Digital de la Fundación Telefónica, durante la presentación de la muestra.

El público puede, de esta manera, bucear y participar de nueve instalaciones diseñadas con tecnologías como VR, fotogrametría, videomapping, 3D, desarrollo de software y tecnología de análisis de la imagen o el pintado digital que interpretan digitalmente la obra de ocho artistas de solera: Joaquín Torres García, Roberto Matta, Juan Gris, René Magritte, Paul Delvaux, Eduardo Chillida, María Blanchard y Antoni Tàpies.

Los originales no están presentes y esto facilita que la exposición pueda replicarse y visitarse de forma simultánea en ocho ciudades - Lima, Bogotá, Ciudad de México, Quito, Mar de Plata, Santiago de Chile y Montevideo además de Madrid- que podrán interactuar e intercambiar impresiones en tiempo real a través del Mapamundi Intangible, diseñado especialmente para impulsar esta experiencia digital.

"Queríamos dar un paso más partiendo de la reflexión de cómo nos impacta la revolución digital y cómo, a la vez, ésta influye en el arte", afirma Laura Fernández, responsable de colecciones y patrimonio de la Fundación Telefónica. "La exposición se sustenta en tres pilares: por un lado, las nueve obras más solicitadas de la colección; por otro, el público, que con sus voz o su presencia puede interactuar con ellas; y por último, la tecnología que nos facilita las herramientas para esto y para poder estar simultáneamente en todos estos países".

"El espectador no va a ver las obras pero se va a llevar a cambio una experiencia y va a volver a casa con la sensación de que ha hecho cosas", añade Nacho Martín, responsable de la metodología design thinking de Accenture para este proyecto. Una experiencia que según Fernández permitirá al visitante "emocionarse, aprender, participar, entrar en la mente del artista y en la obra de arte".

De esta manera, gracias a una gafas 3D de realidad virtual podremos convertirnos en parte del lienzo L'appel del surrealista Paul Delvaux, vivir una experiencia multisensorial e introducirnos dentro de la escultura Homenaje a la mar III de Eduardo Chillida o rodear la versión digital creada a partir de las texturas o capas de la obra Assemblage amb graffiti de Tàpies. Modificar la la Nature morte cubiste de Maria Blanchard a través de una mesa interactiva, crear música cubista a partir de un lienzo de Juan Gris gracias a un software de detección de movimiento, sentirnos protagonistas del cuadro de Magritte La belle société por obra y gracia de un programa que proyecta la figura de los espectadores o practicar la pintura digital sobre las Morfologías psicológicas de Roberto Matta son otras de las propuestas de la exposición.

Para el artista digital Daniel Canogar, que ha participado como asesor del Intangibles, estamos ante un "proyecto de alto riesgo, una exposición sobre el acto de exponer, una metaexposición. Escocerá a mucha gente del arte y va a crear conversaciones que había que tener. Hasta ahora una iba a visitar las colecciones de arte pero estamos ante una nueva realidad. Antes consultábamos la Espasa ahora Google, antes íbamos a la biblioteca ahora a Youtube, por eso me interesa esta nueva óptica para presentar las colecciones de arte".

La muestra, que permanecerá abierta hasta el 23 de febrero en la tercera planta de su sede de la Gran Vía madrileña, ha contado con el asesoramiento de una treintena de artistas, periodistas, comisarios de exposiciones y público en general. Sus aportaciones fueron documentadas en vídeo y también pueden verse a través de diferentes proyecciones en la sala.