Los once indios y 39 argelinos prosiguen su protesta en la Plaza de España, frente a la Delegación del Gobierno, reivindicando que se les permita el traslado a la Península, después de más de dos años de permanencia en el Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI).

A medida que van pasando los días y no van encontrando una respuesta satisfactoria a sus peticiones, los inmigrantes están sufriendo las consecuencias de no ingerir alimentos, hasta el punto de que uno de los concentrados intentó suicidarse ayer mientras otros diez tuvieron que ser trasladados al Hospital Comarcal para recibir asistencia sanitaria.

Soluciones

Los inmigrantes, que ya han tenido una fallida reunión con la Delegación del Gobierno, advierten que seguirán en huelga de hambre "hasta la muerte" si no se atiende la solicitud de salir de Melilla después de más de dos años esperando el "salvoconducto" que les permita viajar a la Península.

En el último encuentro mantenido con la Delegación de Gobierno se les instó a que volvieran al Centro de Estancia Temporal para Inmigrantes (CETI) y que, una vez allí, se comenzarían a buscar soluciones a su situación.

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