Seis personas han sido detenidas y 17 están siendo investigadas en el marco de la operación 'Ángeles y Demonios' en Italia por manipular a niños haciéndoles creer que habían sufrido malos episodios con sus familias para arrebatárselos y entregárselos a otras familias de amigos y conocidos de los implicados. Los acusados llegaban incluso a proporcionales descargas eléctricas mediante electrodos en las manos para 'ayudarles a recordar', según informa La Repubblica. En total, se tiene constancia de siete casos.

Entre los detenidos e investigados se encuentran psicólogos y terapeutas, movidos por dinero, ya que recibían 135 euros por sesión con los pequeños, el alcalde de la ciudad de Bibbiano, que se encuentra en arresto domiciliario, Andrea Carletti, del Partido Democrático (PD), responsable de los servicios sociales de los municipios del Valle de Enza, la coordinadora del servicio, una asistente social y tres psicoterapeutas. Varios trabajadores socio-sanitarios y educadores tienen prohibido volver a ejercer su profesión y una ONG, encargada del servicio de psicoterapia y cursos de formación, estaba implicada.

A todos ellos se les acusa de delitos de fraude, abuso de poder, malos tratos a menores, violencia privada, extorsión y malversación de dinero público, entre otros cargos, como el de lesiones gravísimas, ya que algunas víctimas presentan signos de discapacidad, y en algunos casos toxicodependencia y autolesiones.

"Durante una sesión de psicoterapia, en octubre en Bibbiano, sin la autorización de los padres, una menor fue sometida a tratamiento sanitario no consentido. Se utilizaba un instrumento de impulsos electromagnéticos, con cables que debía tener sostener entre las manos, presentándole el aparato como una 'maquinita mágica' necesaria para los niños para escuchar las cosas malas sucedidas a lo largo de su vida", figura en la orden de arresto de algunos detenidos. Esta era una forma de "iniciar la sesión hablando de presuntos abusos sexuales".

Según los investigadores, en uno de los casos se falsificaron los dibujos de una niña para demostrar que había sido víctima de violencia sexual por parte de la pareja de su madre, algo que nunca se había producido. Además, se han encontrado numerosos paquetes y regalos con notas cariñosas de los padres que nunca fueron entregados a sus hijos.

Uno de los padres analiza lo que ha sufrido asegurando que "todo comenzó con la separación matrimonial. Los dos niños pequeños se quedaron con su madre y el mayor, de 17, conmigo. Poco después los asistentes sociales comenzaron a escribir que yo era violento y maltrataba a los niños, separándome de ellos, sin poder verlos. Cuando vi esas falsedades, denuncié todo. Hoy me siento liberado de una pesadilla".

Por otro lado, una de las niñas, apartada de su familia en 2016 para ser entregada a una pareja de dos mujeres, escribía una carta a su padre en la que se hace patente la tristeza de la pequeña: "querido papá, te echo de menos. Espero que nos veamos pronto. Me podrías escribir un mensaje más a menudo. Lo espero con todo mi corazón. Te quiero de forma gigante e infinita".

Por su parte, el presidente del Gobierno y ministro del Interior, Matteo Salvini, ha exigido que se inicie una investigación sobre las casas de familia, que acogen menores, discapacitados, ancianos y personas en dificultad, y las ha criticado asegurando que "muy a menudo ganan millones a costa de la piel de niños sustraídos a las familias"

Además, Salvini ha asegurado tener muchos indicios de casos falsos de abusos y secuestros con el fin de obtener un beneficio económico. De esta forma, se pone en duda el sistema de cuidados infantil con el que 14.000 menores son acogidos por familias o se encuentran en casas de familia.