Son gemelos, pero han nacido con dos meses de diferencia y en años distintos. Un caso científicamente extraño. Es la historia de Alessandro y Andrea, los gemelos de Monza (Italia) que llegaron al mundo el 24 de diciembre de 2018 y el 22 de febrero de 2019, respectivamente.

18 de diciembre y Lucía, de 35 años, comienza a tener pérdidas y se ve obligada a dar a luz a uno de sus gemelos, 24 semanas antes de lo previsto. El niño tenía un 50% de posibilidades de vivir.

"Se me rompió la bolsa y tuvieron que ingresarme. En el hospital intentaron que siguiera adelante con el embarazo, pero tuvieron que intervenir", explica la mujer.  "En lugar de una cesárea de emergencia, lo más fácil, quisieron intentar que tuviese un parto natural, dejando la placenta y parte del cordón umbilical en el útero para permitirme continuar con el embarazo de Andrea", prosigue.

A pesar de las delicadas circunstancias y que el niño venía de nalgas, el parto terminó sin complicaciones. "La esperanza era que el segundo embarazo durase, por lo menos, hasta las 26 semanas", prosigue. Tuvieron suerte y alcazaron las 28 semanas. Nadie imaginaba que el segundo bebé pudiese permanecer otros 60 días en el interior del cuerpo de su madre.

El embarazo continuó durante otros dos meses y el equipo médico hizo todo lo posible para que la niña estuviera desarrollándose en el útero hasta la semana 33 como mínimo.

La idea era que alcanzara los dos kilos de peso y reducir los problemas relacionados con los niños prematuros. Andrea llegaba al mundo el 22 de febrero, dos meses después de su hermano y en un año diferente.