26 años después de que su padre, que no es otro que Sánchez Dragó, consiguiese obtener el premio mejor dotado de las letras castellanas, Ayanta Barilli ha logrado obtener el puesto de finalista por su primera novela (Un mar violeta oscuro), en una edición del Premio Planeta que ha destacado por la poca visibilidad de la esfera política catalana y por la cada vez mayor presencia de mujeres entre los nominados.

Barilli recorre mucho de su propio pasado con este libro, que ella misma describe como una "novela polifónica" que recorre la historia de su bisabuela, su abuela y su madre, abocadas a la locura por culpa de una figura masculina. Precisamente, Barilli ha utilizado una extensiva investigación familiar, utilizando incluso fragmentos de texto reales escritos por sus ascendientes, las mismas que protagonizan una historia que, reconoce, cabalga en el límite entre la realidad y la ficción. Al final, la obra, de acuerdo a su autora, trata de ser "un canto a la reconciliación entre hombres y mujeres, totalmente necesario."

No es de extrañar que en su primera creación literaria (al margen de Pacto de Sangre, que escribió junto a su padre) haya explorado sus raíces familiares. Barilli describe que, desde niña, su padre la ha mantenido expuesta al oficio de escritor. También señala lo importantes que resultaron las muertes de su madre, cuando tenía 12 años, y la de su abuela más recientemente. Precisamente, menciona que fue esta última la que la inspiró a investigar su linaje, dándose cuenta de que no sabía nada de él.

Una trayectoria polifacética

Pese a ello, su carrera hasta ahora había transcurrido principalmente por el mundo audiovisual. Tras estudiar arte dramático y danza clásica, debutó como presentadora en el programa Buenos Días de Televisión Española, con tan sólo 20 años. Ahí comenzaría una carrera que la llevaría por el cine (actuando en películas como Lo más natural, Amo tu cama rica  o Volavérunt) la televisión (actuó en las series Pepa y Pepe, A las once en casa o ¿Qué pasó con Jorge Sanz?) el teatro (no sólo actuando; ha dirigido la obra Kafka y la Muñeca Viajera y asumiendo la dirección artística del Teatro Lara) y la radio, en la que encontró cobijo bajo el ala de Federico Jiménez Losantos, que la llevó consigo a la cadena esRadio, donde actualmente presenta los programas EsSexo y EsAmor.

Tal vez, este segundo puesto en el premio planeta marque el inicio de una trayectoria literaria en la estela de la de su padre, quien describió la ceremonia (en la que acompañó en todo momento a su hija) como "Un momento extraordinariamente emocionante".