El vicesecretario de Comunicación del PP, Pablo Casado, ha exhibido este lunes los apoyos con los que cuenta de cuatro de los cinco precandidatos con los que compitió en la primera fase de las primarias del PP y ha prometido integración con ellos, en especial con la secretaria general, María Dolores de Cospedal y su equipo, al igual que al presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, de quien ha dicho que "yo quiero tenerle muy cerca".

En un desayuno informativo en el que ha expuesto su proyecto para presidir el PP y eventualmente también el Gobierno, Casado ha hablado de "integración efectiva en la que cabemos todos" y ha destacado que "apenas horas después de abrir las urnas el 5 de julio esté colaborando con cinco candidatos", en relación a Cospedal, José Ramón García Hernández y Elio Cabanes, presentes en el acto, y José Manuel García Margallo, que ha excusado su asistencia.

Casado ha hecho una mención especial a Cospedal, a quien se ha referido como "mi jefa" y "mi amiga" y de la que ha asegurado que "debe seguir siendo parte" del futuro del PP.

Los equipos de Casado y Cospedal trabajan conjuntamente desde hace días en la campaña del vicesecretario, que este lunes ha recordado que la secretaria general "tuvo un gran apoyo" en la votación de los afiliados, en la quedó en tercera posición por detrás de la exvicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría y de él mismo. Después, ha colaborado con él "sin pedir nada a nadie, sin recordar a nadie lo que había hecho".

Precisamente, a su llegada este lunes al desayuno informativo que ha protagonizado Casado, Cospedal ha hecho expreso su apoyo a su candidatura, frente a la de Soraya Sáenz de Santamaría.

Preguntado sobre si cree que el partido se decantará así a su favor, Casado se ha limitado a indicat que "hay una mayoría de inscritos que decidieron apostar por unos candidatos que ahora tienen que decidir con los delegados", en alusión a los compromisarios.

Sobre la integración con su adversaria, Sáenz de Santamaría, en la votación de los compromisarios del próximo sábado en el congreso extraordinario, Casado se ha ceñido a las reglas del cónclave popular, que contemplan una votación a doble vuelta, que debe celebrarse. Después, también ha mostrado su intención de integrar.

Su intención, ha insistido, no es unirse en una sola candidatura con ella, algo que la exvicepresidenta afirma que seguirá intentando hasta el final. El vicesecretario no lo contempla, como tampoco imagina que el todavía presidente del partido, Mariano Rajoy, pueda plantearlo en el esperado discurso, el último como líder del PP, que ponunciará el viernes en la apertura del congreso extraordinario.

"Una de las muchas virtudes de Mariano Rajoy es que es una persona previsible y cuando convocó el congreso extraordinario dijo que quería integración después", ha recordado Casado, que ha insistido en que la segunda vuelta, la votación de compromisarios, tiene que celebrarse entre Sáenz de Santamaría y él mismo.

A cuatro días de que empiece el congreso extraordinario que se celebrará el 20 y 21 de julio, Casado ha rebajado el tono en relación al actual equipo directivo del PP y también al Gobierno de Rajoy, de quien ha intentado distanciarse en las pasadas semanas, reprochando incluso no haber actuado con suficiente contundencia, por ejemplo, en Cataluña o haber subido impuestos en lugar de bajarlos.

Muchas de estas consideraciones iban directamente en contra de Sáenz de Santamaría o dirigentes que la apoyan, como el exministro de Hacienda Cristóbal Montoro. Asimismo, a la balanza de las alusiones de Casado se habían inclinado claramente a favor del expresidente José María Aznar en detrimento de Rajoy, algo que este lunes ha modificado en su discurso.

Fuentes de su equipo han admitido que en los últimos días el vicesecretario estaba apareciendo como un candidato demasiado "agresivo", una actitud que no beneficia ahora que, afirman, va encarrilando los apoyos para poder ganar el congreso.

Uno de los momentos de más enconamiento se ha vivido el pasado fin de semana, con la difusión de un vídeo que atacaba a dirigentes del PP andaluz que apoyan a Sáenz de Santamaría y que se ha atribuido al entorno de Casado. "Ese vídeo a quien más perjudica es a mí", ha señalado este lunes el vicesecretario.

En su intervención en el desayuno informativo, Casado ha destacado en varias ocasiones que el Gobieno de Rajoy impidió el rescate y sobre Cataluña se ha mostrado a favor de recuperar los delitos de sedición y contra la sola convocatoria de referendums ilegales, pero ha respaldado al anterior Ejecutivo.

"¿Esto quiere decir que lo hemos hecho mal, que pongo en duda el Gobierno de estos años?", se ha preguntado Casado, que acto seguid ha respondido que "no, ahí estaba yo".

Por otra parte, ha mostrado su "máximo respeto" por Sáenz de Santamaría y ha descartado haberla criticado en campaña, ha afirmado que las diferencias se enmarcan en un "debate ideológico".

"Yo sé cómo estoy actuando, duermo a pierna suelta y digo lo que los afiliados de base quieren escuchar", dicho Casado, que ha negado ser "en absoluto discrepante o contra nadie". "Sáenz de Santamaría tiene todo mi respeto", ha insistido.